ALSASUA
Categoría histórica: Villa.
Categoría administrativa: Municipio.
Partido Judicial: Pamplona.
Merindad: Pamplona.
Comarca geográfica: Burunda.
Población (1986): 7.062 habitantes de hecho, 7.071 de derecho.
Superficie: 27 km2
Densidad: 261,6 hab/km2
Altitud en el núcleo urbano: 584 m
Distancia a Pamplona: 50 km
Comunicaciones: Situada en el cruce entre la nacional N-240 A Pamplona-Vitoria con final en Alsasua y la N-1 Madrid-Irún.
Gentilicio: Alsasuarra.
Geografía
Limita al N con Atáun (Guipúzcoa), al E con Urdiáin, al S con Urbasa y al O con Olazagutía y el monte Alzania.
Se extiende desde Urbasa hasta las proximidades de Aralar, incurvándose su término hacia el NO. Abarca las siguientes unidades geomorfológicas: al S, la vertiente septentrional de la sierra de Urbasa (Urbasa, 1.153 m), cuya cornisa subvertical de calizas dolomíticas pertenecientes al Paleoceno domina escarpadamente el talud margoso o margo-calizo del Cretácico Superior; en el centro, el fondo del corredor del Araquil -allí donde a este río, que aquí se llama Burunda, se une el Alzania -, cubierto con los depósitos detríticos de los glacis que descienden de la sierra y de las terrazas que acompañan al río, depósitos cuyo aspecto ocre contrasta fuertemente con el gris-oscuro de las margas del Cretácico infrayacentes; y al N el sinclinal de Olzaurte, de dirección NO-SE, donde se conservan las margas del Cretácico Superior, rodeadas por el complejo margo-areniscoso supraurgoniano (Albiense Superior-Cenomaniense Inferior) y que topográficamente culmina en Balankalecu (982 m).
El clima es de tipo subatlántico por la abundancia de las precipitaciones, el rigor de los inviernos y la aparición de una tímida aridez estival en agosto. La temperatura media de enero es de 4,5° C, la de agosto 18° C, la precipitación anual 1.383 mm, caídos en unos 140 días, y la evapotranspiración potencial media anual de 660 mm. Robledales atlánticos en las partes bajas y hayedos en las altas son las dos clases principales de bosques que cubrirían el territorio antes del poblamiento humano; aún siguen siéndolo, aunque muy reducidos en superficie, seguidos del castañar y pinar de repoblación.
El municipio cuenta con 1.867 Ha de propiedad comunal (69,6% de la superficie censada), de las cuales 1.469 son de monte maderable, 208 de pastos y 22 de secano. La tierra de labor ha ido perdiendo importancia a lo largo del siglo XX a medida que la ganaban los prados. La patata tardía, el maíz, los forrajes (praderas polifitas, nabo, veza, alfalfa, etc) y las hortalizas son los cultivos más destacados. Los llamados por el Catastro prados artificiales de secano pasaron de 15 Ha en los primeros decenios de nuestro siglo a 298 en 1950 y 292 en 1982.
El ganado de labor, que había contado con 530 cabezas de bovino entre bueyes y vacas, 21 caballos y yeguas y 51 asnos, en 1935, p.ej., había quedado reducido en 1982 a 3 cabezas de ganado mular y 2 de asnal. La razón de este descenso hay que buscarla en la difusión de las máquinas agrícolas.
La ganadería es poco importante: ganado bovino de raza frisona y pardo-alpina, destinado sobre todo al ordeño, ganado lanar lacho (casi todas ovejas), cabras, cerdos de raza landrace y unas pocas cabezas de ganado equino. Hay también 650 conejos en 2 explotaciones. El 3 de octubre de 1951 fue aprobada la creación de una Cooperativa Agrícola-Caja Rural, que sería disuelta el 14 de agosto de 1970.
En 1984 Alsasua disponía de 2.563 puestos de trabajo. El sector que genera mayor número de empleos es el secundario con 1.561 puestos de trabajo. Los servicios ocupan a 977 personas y el sector primario únicamente a 25. La actividad industrial predominante es la de transformados metálicos con 954 empleos, le sigue en importancia la transformación del caucho con 202 trabajadores. El subsector de la construcción ocupa a 203 personas, y 111 la industrial de la madera.
En el sector servicios la actividad que proporciona mayor número de puestos de trabajo es la del transporte, con 225 empleos, de ellos más del 65 por ciento se debe a la actividad del ferrocarril. En el comercio la venta al detalle da trabajo a 129 personas; otras 130 encuentran su puesto en la enseñanza.
La población activa se eleva a unos 2.700 trabajadores, de los cuales 215 buscan el primer empleo. En Alsasua, cerca de 100 personas procedentes de otros municipios tienen su puesto de trabajo.
El total de centros, lugares y establecimientos productivos, se cifra en 463. El mayor número de ellos corresponde al sector servicios con 351, dentro de él la actividad del comercio cuenta con 140 centros; los locales de bebidas y hostelería con 45; el transporte y comunicaciones con 38; los servicios personales y domésticos con 51; la actividad de reparación con 31 talleres y la enseñanza con 11 centros de educación: cuatro de EGB y uno de formación profesional público, y 6 de enseñanza privada.
La actividad agraria es la menos representativa en este municipio, hay 25 explotaciones con dedicación principal y cerca de 30 a tiempo parcial, la orientación productiva de tales explotaciones es ganadera de vacuno y porcino. Si bien el mayor censo ganadero es el ovino.
Las actividades industriales y de construcción cuentan con 87 establecimientos; en 25 de ellos se desarrolla la fabricación de productos metálicos, que da empleo a 517 trabajadores. En este grupo dos empresas ocupan a 182 y 80 empleados respectivamente. En la actividad de construcción de maquinaria en general y material de transporte existen 10 empresas que dan trabajo a 434 personas, 200 de las cuales están empleadas en una de las empresas dedicada a la reparación de material ferroviario. Otro grupo de actividad lo constituye la transformación del caucho, que con dos centros fabriles ocupa a 202 trabajadores. El sector de la madera está constituido por 9 empresas, una de las cuales cuenta con más de 65 trabajadores. En la construcción hay 22 empresas, 4 de las cuales son de montaje e instalación y acabado de edificios.
Población
El crecimiento de Alsasua se halla ligado en primer término al hecho de haber sido elegido dicho lugar de la Burunda como estación ferroviaria importante, lo cual hizo que crecieran las actividades secundarias (mercado semanal y ferias ganaderas) y terciarias.
La industria explica que la población haya crecido de modo casi ininterrumpido, salvo los dos estancamientos o retrocesos de finales del siglo XIX y de la última guerra civil.
Desempleo registrado (31-3-1987): 862 personas.
Presupuesto municipal (1987): 430.455.000 pts.
Heráldica municipal
Cuartelado: 1.º de plata y un águila explayada de sable. 2.º de gules y un ciervo andante en su color natural. 3.º de azur y un castillo de oro. 4.º de oro y un jabalí de sable. Con los mismos colores y metales aparecen estas armas pintadas en las vidrieras del palacio de la Diputación. El primer cuartel corresponde al valle de la Burunda como tal, del que Alsasua es la capital, y data del fuero especial concedido por Sancho el Fuerte.
Casa consistorial
Anteriormente estuvo en la Plaza de los Fueros, en el edificio “Gure Etxea”, que se utiliza hoy como Casa de Cultura. La actual se construyó a comienzos del pasado siglo. Su estado actual obedece a una remodelación llevada a cabo en 1943, de acuerdo con un proyecto de Casimiro Díaz, y a una reciente reforma realizada con una inversión de 44,4 millones, financiados con ayuda del Gobierno de Navarra. Su exterior es de piedra de sillería. En su planta baja se albergan las oficinas generales, secretaría, oficina de catastro y retén de la Policía Municipal. En la primera planta se hallan el Salón de Plenos, el despacho de Alcaldía, la sala de reuniones de la Comisión de Gobierno y otros despachos. Tras esta reforma, la Casa fue inaugurada el 14 de septiembre de 1987, coincidiendo con las fiestas patronales.
En su término se localiza el yacimiento en cueva de Atabo*, con evidencias del Epipaleolítico, Neolítico y Eneolítico-Bronce. También dentro de este municipio están situados una parte de diversos sectores dolménicos: Sector de Altzania*, con los dólmenes de Balenkaleku* Norte y Sur, Muñaan* I y II, arte del sector de Aratz-Alsasua*, con el dolmen de Saratxacolegui* y parte de la estación de Atáun Borunda*.
Con la grafía de “Alssatssu” y otras variantes menores consta ya en el siglo XII como uno de los lugares de la Burunda, de la que no se segregó como municipio propio hasta 1846. Era villa de señorío realengo, que liquidaba su pecha globalmente con la de todo el valle, como se comprueba ya en 1280. Ello supone que no había tenido efecto el proyecto de Sancho VII el Fuerte (1208) de reagrupar la población de la Burunda en un núcleo más fácilmente defendible y organizado conforme al modelo del fuero de Logroño-Laguardia. Las sumas en dinero y en especie liquidadas en 1268 por razón del “rediezmo” sugieren que el vecindario alsatuarra no llegaba ni a la mitad que el de los lugares contiguos de Urdiáin y Olazagutía; sin embargo, un siglo después ya aventajaba en un fuego a este ultimo, y solamente en uno le superaba todavía Urdiáin, que, transcurridos otras dos centurias no llegaban a la mitad de la población de Alsasua. En la gran depresión del siglo XIV su término debió de fagocitar los desolados cercanos de Angustina, Argiñano, Elcuren, Sagatsua y Urayar. Aunque no obtuvo el rango de buena villa y representación en las Cortes del reino, su emplazamiento la convirtió tempranamente en cabeza de valle. Los reyes Catalina y Juan III la liberaron (1498) de la pecha denominada Gallurdea.
Todavía en el siglo XVI se regía Alsasua por la junta del valle de Burunda, al que pertenecía y seguiría perteneciendo durante los tres siglos que siguieron. Hasta 1846, la junta se reunía en Batzarremendía cabe la desaparecida ermita de Santa Engracia de Urdiáin. Durante la guerra contra la Convención*, Alsasua fue saqueada por las tropas francesas. Sufrió las contribuciones forzosas de unos y otros durante la de Independencia*, para ser arrasada -sobre todo su iglesia – por los soldados franceses batidos en retirada tras la batalla de Vitoria (1813). Sufrió asimismo destrucciones de los Realistas (1822) y, en 1834 (22 de abril), presenció una de las más resonantes victorias carlistas sobre los cristinos. En dicha acción, conocida como la de la venta de Alsasua, el general Quesada, fue atacado por el carlista Zumalacárregui, dejando más de 100 prisioneros y gran número de bajas.
En 1802 tenía aduana y administración de tabacos. En 1849 tenía un molino harinero y 2.400 robadas de cultivo, de ellas 1.200 de primera calidad, 600 de segunda y 600 de tercera, destinadas a cereales y otros frutos, que rendían el 3 por 1. El camino que llegaba de Pamplona todavía era carretero y desde allí hacia Guipúzcoa era de herradura. Contaba con industria de lienzos y corte de maderas, sobre todo para los arsenales.
En 1863 se inauguró la estación del Ferrocarril y en 1907 Alfonso XIII convirtió el lugar de Alsasua en villa, sancionando así su rápido crecimiento demográfico e industrial. Veinte años después tenía una gran fábrica de curtidos y charoles, otra de hierro esmaltado, una serrería mecánica, una gran fundición y fábrica de camas de hierro, además de dos de gaseosas, dos centrales eléctricas y un taller de construcción de aparatos ortopédicos. Se le había dotado de puesto de la guardia civil, fondas en el nuevo barrio surgido junto a la estación y otras cuatro en la villa.
Su agricultura y ganadería continuaban constituyendo la dedicación primordial. Alsasua, como parte de la Burunda, mantuvo pleitos seculares con las comunidades vecinas de Álava por el disfrute de sus montes, al parecer desde 1406 en que Enrique III de Castilla confirmó la posesión de determinadas tierras a los pobladores de la jurisdicción de la villa de Segura. Los intentos de amojonamiento definitivo se sucedieron desde entonces hasta el de 1516, que parece mantenerse sin mayores inconvenientes hasta el siglo VIII. Se revisaron en 1745, pero los pleitos sobre aprovechamientos recomenzaron (1782, 1789) y se multiplicaron sobre todo desde 1802.
Sólo en la llamada Concordia de 1897 pudo considerarse resuelto el problema, al reconocer todos la jurisdicción territorial de cada pueblo y la existencia de una zona neutra a lo largo de la muga navarroguipuzcoana, como zona de aprovechamiento común (Parzonería*).
Bibliografía
J. M. Jimeno Jurío: Alsasua, Pamplona s.a., “Temas de Cultura Popular”, n. 196.
Arte
En pleno centro urbano se erige la parroquia de La Asunción, edificio construido a principios del siglo XVI de planta rectangular dividida en tres naves y cabecera semioctogonal con contrafuertes. Esta última se cubre con una bóveda estrellada cuyos nervios descansan en columnillas acodilladas. Todo el interior se restauró sustancialmente entre 1960 y 1964. El exterior resulta muy sobrio, destaca solamente el gran Pórtico con columnas de piedra. Su construcción se extendió desde 1719 en que lo comenzaron los canteros Juan y Andrés de Urrestarazu, hasta 1808 en que se concluyó con las trazas proporcionadas por el maestro de obras José Armendáriz.
El interior está presidido por un retablo romanista de excelente calidad en su escultura y policromía; consta de banco, dos cuerpos y ático en los que se desarrollan escenas en relieve de la Pasión de Cristo y vida de la Virgen y se alojan tallas de la titular y de diferentes santos. En el mismo presbiterio se halla una cruz de plata punzonada por el platero Sasa. Los retablos colaterales de San Antonio Abad y Santa Catalina son barrocos y se encomendaron al arquitecto, natural de Alsasua, Miguel Sáez de Avínzano, aunque los realizaron los maestros guipuzcoanos Miguel Sagüés y Mateo de Azpiazu, artistas que los llevaron a cabo a partir de 1707, siguiendo el proyecto del arquitecto vecino de Baquedano, Ventura de Andueza. Otros retablos dieciochescos decoraban los muros de la parroquia en otro tiempo. Actualmente encontramos una colección de imágenes del artista contemporáneo José López Furió. Bajo el coro se venera una talla gótica del Crucificado.
Entre las ermitas del pueblo destaca la del Cristo de Otadía, situada en las afueras de la población; consta de dos partes, la primera, más pequeña, parece tratarse de un humilladero del siglo XVI y la segunda, mayor, es una ampliación del siglo XVII. El titular, cobijado en un retablo barroco, es una talla romanista labrada en los últimos años del siglo XVI probablemente por el escultor alsasuarra Juan de Iriarte, fallecido en 1599, el cual legó por vía testamentaria a su pueblo natal un Santo Cristo esculpido por él. Otras ermitas son las de Nuestra Señora de Ercuden, San Juan Bautista y San Pedro Apóstol, común esta última con Urdiáin. Han desaparecido las de San Martín, Santa Bárbara y Santa Lucía.
Arquitectura civil
El caserío antiguo se concentra en torno a la iglesia parroquial en el barrio de Santa Cruz, en el que destacan grandes casas de varias plantas con portalones de medio punto y vanos rectos de pequeñas dimensiones, algunas blasonadas, como las que se ven en la Plaza. En 1780 Juan Antonio Lacunza, arquitecto de Cirauqui reconstruyó la casa abacial que se adosa a la iglesia.
Alsasua posee también algunos puentes de interés. La carretera general está cruzada por un viejo puente de piedra de ojo de medio punto sobre las aguas del río Burunda. Quedan también varios puentes sobre las regatas de Oyanga y Aizpilera, destacan entre ellos los de Baicola y Uzcunu. En el camino hacia el monte vecinal de Alzania hay un puente medieval de ojo único de medio punto denominado Atayo. El puente de San Pedro, famoso antiguamente, ha sido reformado.
Bibliografía
J.M. Jimeno Jurío, Alsasua, TCP. núm. 196.
Cultura
Las fiestas patronales comienzan el 13 de septiembre. Se celebran romerías a la ermita de San Pedro el 29 de junio y a la ermita de San Juan. En la primera el alcalde inicia la fiesta civil con el baile de un “aurresku”. En ella se sirve vino en las clásicas tacitas de plata. También hay otras tradiciones: la cencerrada del 5 de enero, las fiestas de Santa Águeda en febrero y la de los “quintos”; en la segunda se baila en la plaza el “Giza dantza”, compuesta de varios números entre los cuales está el “zortzico”. Muchachos y muchachas bailan al son del txistu y se termina con una “Karrika dantza”. Este baile se repite al atardecer del día de San Juan y con ocasión de las romerías. Los carnavales cuentan con la presencia de los “momotxorroak”, una combinación de astados-carniceros-monstruos que acosan con sus sardes a los espectadores.
Comunicaciones
Alsasua es un importante nudo de comunicaciones. En la localidad se unen la línea férrea Madrid-Francia por Irún y el ramal que viene de Pamplona. En cuanto a las carreteras, en Alsasua convergen la nacional 1 Madrid-Irún y la nacional 240-A Pamplona-Vitoria. La inadecuación de los 2 km de travesía urbana de la N-1 llevó a aprobar el primer proyecto de variante en 1956, pero el definitivo tuvo que esperar a 1978. Las obras se iniciaron en 1981 y se terminaron en 1983. El tramo urbano fue evitado mediante la construcción de una nueva carretera excéntrica de casi 3 km en su eje principal y unos 4 en 11 ramales secundarios, con tres puentes, un paso subterráneo y tres elevados.
Toponimia menor
Aunceche, sierra y camino; Betorrey, alto; Chiqui, casa; Fernando, casa; Otzaurte, barranco; Salud, la, fuente; Urbasa, Alto; Virgen de Ercuden, ermita.