LANTZ
Categoría histórica: Villa.
Categoría administrativa: Municipio.
Partido Judicial: Pamplona.
Merindad: Pamplona.
Comarca geográfica: Valle de Anúe.
Población (1986): 145 habitantes de hecho, 146 de derecho.
Superficie: 17,3 km2
Densidad: 8,4 hab/km2
Altitud en el núcleo de viviendas: 629 m
Distancia a Pamplona: 25 km
Comunicaciones: Carretera local que se une a nacional N-121 A, Pamplona-Behovia, entre Olagüe y Ventas de Arraiz.
Geografía
Limita al N con Baztán, al E y S con Anúe y al O con Ulzama. Tiene 1.671 Ha de las cuales 1.446 (86,6%) son comunales (380 de pastos, 76 de helechales, 22 de prados).
El término de Lantz, avenado hacia el río Mediano, afluente del Ulzama, es de una gran complejidad geológica y geomorfológica. El E forma parte del macizo paleozoico de Quinto Real o Alduides y de su cobertera detrítica. Cumbres suaves, que aquí culminan a unos 1.150 m (Caridadade, 1153 y Algorrieta, 1.165 m), y arroyos encajados son, sus notas más características, juntamente con la complejidad tectónica debida al plegamiento alpino que resquebrajó el viejo macizo. El O corresponde a la cobertera sedimentaria marina del Cretácico, formada principalmente por margas y plegada según ejes de rumbo NO-SE.
Tiene clima subatlántico, húmedo pero con oscilaciones estacionales de la temperatura acusadas. Algunos de los valores medios anuales son: 8º-10º de temperatura, 1.600-1.800 mm de precipitaciones, caídas en unos 140 días, y 600-650 mm de evapotranspiración potencial. Los bosques más extensos conservados son los hayedos (unas 900 Ha); los robledales, castañares y fresnales suman extensiones muy inferiores. La repoblación forestal cubrió unas 21 Ha con pino laricio de Austria, alerce del Japón y pino insigne.
Las actividades agropecuarias absorben casi la totalidad de la población activa de Lantz. Aquellas ocupan (1984) a 51 personas, de las cuales 42 tienen una dedicación plena. Colaboran con ellas cerca de 60 familiares en tareas esporádicas. Los prados superan ampliamente en extensión a los cultivos. Entre estos, los forrajeros sumaban las 3/4 partes del total. Las ramas de ganadería más importantes son la bovina, con 301 cabezas en 1982, en su mayor parte de raza frisona, la ovina de raza lacha, con 723 reses, la porcina de raza landrace, con 227 cabezas, la caballar, con 19 y la aviar, con 734 gallinas y pollos. La primera es hoy más numerosa que en el pasado, y sobre todo más dedicada a la producción de leche; la cabaña ovina fue en los primeros decenios del siglo XX superior a la actual (1.618 reses en 1906), la porcina siempre tuvo cantidades parecidas a las de 1982 y la caballar mayores.
El terreno comunal cubre el 86,5% de la superficie censada del término municipal, abarcando todo el terreno forestal.
El sector servicios ocupa a cuatro personas en cuatro establecimientos de trabajo (correos, enseñanza, servicios religiosos y servicio doméstico).
Otra actividad del municipio es la distribución de agua, que ocupa a una persona. La población activa (1984) es de 55 personas, de las que 8 tienen su puesto de trabajo fuera del municipio; nadie en situación de paro.
Desempleo registrado (31.3.1987): 2 personas.
Presupuesto municipal (1987): 11.933.000 ptas.
Heráldica municipal
Trae de plata y un águila de sable posada. La punta de azur con un creciente de plata entre dos flores de lis de oro. Por timbre un yelmo empeñachado. El sello más antiguo que se conoce de esta villa se encuentra en la Carta de Unión y Amistad que, a la muerte de Carlos el Calvo, hicieron los ricoshombres, caballeros, infanzones y hombres buenos de las buenas villas reunidos en Puente la Reina el 13 de marzo de 1328, comprometiéndose a guardar el reino para quien debiera reinar. Representa dos torres y entre ellas, en jefe, un águila explayada.
Casa Consistorial
Está situada junto a la iglesia, es de piedra y de características arquitectónicas propias de la zona. Consta de planta baja, una elevada y sabaya. Se han realizado mejoras en el inmueble por importe de 6,9 millones, con ayuda del Gobierno de Navarra. La sede anterior del municipio estuvo en el lugar de la escuela.
El ayuntamiento está regido por alcalde y cuatro concejales.
En su término se sitúa parte de la estación dolménica de Saioa-Loiketa*, concretamente el dolmen de Lantz*.
Desde 1971 se tiene conocimiento de la existencia de una explotación minera de hierro, de época romana, en Lantz, ya que se recogieron en el interior de una cueva diversos fragmentos de cerámica romana por componentes del Grupo Espeleológico G.A.E.X. Estos materiales fueron objeto de publicación por parte de M.ª Ángeles Mezquíriz, primero en una breve nota al XII Congreso Arqueológico Nacional y posteriormente, con más detalle, en la Revista Príncipe de Viana.
Durante 1983 y 1984, M. I. Tabar y M. Unzu llevaron a cabo unas campañas de prospecciones con sondeos, ya que dadas las características del terreno, cavidades kársticas, no es posible realizar excavaciones arqueológicas sistemáticas. Estos trabajos se publicaron en “Trabajos de Arqueología Navarra. 5”, siendo el estudio detallado de una de las cavidades, “Ayerdi IV” y una visión globalizadora del conjunto.
Ayerdi IV no es un caso aislado de aprovechamiento minero de época romana, sino que forma parte de un conjunto de diez cavidades situadas entorno al barranco del Txorrostarrikoerreka, en las laderas de Ayerdi y Otaño, habiéndose recogido material arqueológico en alguna de ellas, y comprobándose que las galerías de las cavidades kársticas han sido trabajadas artificialmente para la obtención de mineral o como galerías de explotación. Igualmente se ha comprobado en la zona la existencia de calicatas al aire libre que refuerzan la importancia de esta explotación, ya que la extracción de mineral en estas calicatas sería muy superior en cantidad a la obtenida en las galerías.
La dotación humana necesaria en esta explotación minera debió de ser numerosa, lo que exigía la existencia de un establecimiento fijo o poblado minero en las cercanías. La estructura del campamento podría aclarar diversos aspectos del desarrollo de esta explotación, en cuanto a su función económico-social dentro del mundo romano en la provincia de Navarra, pudiendo tratarse exclusivamente de un campamento-dormitorio, o tener una función más amplia, como la transformación del mineral, con instalaciones de hornos, fundiciones, etc.
Después de las exhaustivas prospecciones llevadas a cabo en la zona de Lantz, se considera que la situación del poblado minero corresponde a la que actualmente tiene el pueblo de Lantz. Apoyando esta hipótesis está la estructura urbanística del pueblo de Lantz, que corresponde a una tipología clara de poblamiento de época romana.
En la Edad Media fue villa de señorío realengo, enfranquecida por el rey Teobaldo II que le concedió (1264) el fuero del burgo de San Cernin de Pamplona. Debía, sin embargo, abonar anualmente a la corona 3 sueldos por cada casa y un tributo por los derechos de molienda; por estos conceptos se liquidó en 1280 la suma de 240 sueldos y 40 cahíces de trigo respectivamente. Santa María de Roncesvalles poseyó desde el siglo XIV heredades en su término. Sufrió un importante incendio en 1422.
Hasta las reformas municipales de la primera mitad del siglo XIX la gobernaba un alcalde que nombraba el virrey a propuesta de los vecinos. En 1847 tenía escuela, dotada con 1.000 reales; era el pueblo el que proveía el curato; había un molino harinero y parte de sus gentes se dedicaba a la arriería. En los años veinte de nuestro siglo contaba también con una tejería y puesto de carabineros.
Arte
La construcción de la actual parroquia de Santa Cruz es moderna; tampoco quedan restos del retablo que para la antigua labró Miguel de Espinal y policromó Martín de Urniza. Lo más destacable de la población consiste en la disposición del caserío a ambos lados del camino y en la existencia de grandes casas de los siglos XVII y XVIII, parte de ellas blasonadas.
Bibliografía
T. Biurrun, Inventario de la riqueza artística de la diócesis de Pamplona, en “BOE de Pamplona” (1930), p. 609. J. Caro Baroja, La casa en Navarra (Pamplona, 1983), vol II, p. 288-289.
Carnaval
La villa de Lantz celebra todos los años sus populares Carnavales. La farsa tiene lugar los días segundo y tercero de Carnaval a las doce del mediodía, y el cortejo, de un enorme interés folklórico, desfila por las calles al son de melodías interpretadas por los txistularis.
Son curiosos los personajes que intervienen. El más importante es Miel Otxin*, gigante salteador de caminos hecho con ramas, relleno de paja o helecho, alto gorro cónico con cintas y careta de cartón; viste camisa de colorines, faja y pañuelo rojos, pantalones azules y polainas. Un mozo bailando constantemente lleva este pesado muñeco de tres metros de altura. Otro personaje es Zaldiko, que simboliza un caballo. Un mozo con cara pintada de negro o con un velo transparente y sombrero de segador lleva un armazón de madera que simula el cuerpo de un caballo con la cabeza toscamente representada por una tabla y con una cola de caballo. Corre de forma violenta, salta y cocea en todas las direcciones y derriba a otros.
El personaje más monstruoso y risible es Ziripot. Lleva las piernas embutidas en grandes sacos rellenos de helecho, y por si no fuera poco meten hierba en su amplia blusa.
Enmascara su rostro con un pañuelo o con un sombrero. Se apoya en un largo palo para ayudarse en su torpe caminar. Tres o cuatro personajes llamados Perralzallak o herradores llevan las herramientas propias de su oficio: un martillo, un caldero, tenazas y herraduras. Su misión es herrar al Zaldiko, para ello se detiene el cortejo frente a los portales de varias casas en las que se ha colocado un yunque para simular la operación.
Los demás mozos del pueblo, las Máscaras o Chachos, se disfrazan con lo más extravagante que se pueda imaginar. Un trozo de saco o de cortina sin agujero a alguno les sirve de careta, esgrimen palos o escobas viejas, otros usan canastos y pozales como tocado, los hay quienes se ponen pieles de oveja, incluso un corzo, y en el desfile gritan, aúllan, lanzan estridentes irrintzis y persiguen al caballo.
El martes de Carnaval a las tres de la tarde se juzga al gigante Miel Otxin; después de acusarle de múltiples delitos, un mozo provisto de un gran libro simula leerle la sentencia de muerte. Le disparan dos tiros en la plaza, las máscaras lo despedazan en medio de grandes alaridos y amontonan sus restos y les prenden fuego. Finalmente las Máscaras y otros vecinos del pueblo bailan junto a la hoguera una melodía cuya primera parte tiene una letra jocosa seguida de una “mutildantza” con movimientos de rotación sobre sí mismos y de traslación alrededor de la hoguera.
Algunos autores afirman que la existencia del gigante es anterior a la del famoso bandolero que tenía amedrentada la comarca, y que se celebró una ceremonia anterior con la muerte del Zaldiko, que fue sustituida posteriormente por el hecho real de la captura y ejecución del bandido. El Zaldiko u hombre caballo debe representar el espíritu de la abundancia, ha existido en toda Europa desde época romana y es lógico que en nuestras tierras ganaderas tome la forma de caballo. En el fondo de esta celebración carnavalesca está presente un rito de primavera, anterior al cristianismo, cuya función es asegurar por medio de la muerte del representante de este espíritu de la abundancia, la fertilidad de las cosechas y el retorno de la primavera.
Esparcimiento
Las fiestas patronales en honor de Santa Cruz se celebran del 14 al 16 de septiembre.
Toponimia menor
Algorrieta término; Caridade, término; Erreca-Beltz, río; Landerecheta, término; Lantz, tejar.