SALINAS DE ORO
Categoría histórica: Lugar.
Categoría administrativa: Municipio
Partido Judicial: Estella
Merindad: Estella
Comarca geográfica: Valle de Guesálaz
Población (1986): 112 habitantes de hecho, 112 de derecho.
Superficie: 14,1 km2
Densidad: 7,9 hab/km2
Altitud en el núcleo de viviendas: 683 m.
Distancia a Pamplona: 27 km.
Comunicaciones: Carretera local que llega hasta Pamplona y que también empalma con la general N-111, Pamplona-Logroño, entre Lorca y Puente la Reina.
Gentilicio: Salinero.
Geografía
Limita al N con Goñi, al E con Izurzu y Muniáin de Guesálaz y Vidaurreta, al S con Guirguillano y Guesálaz y al O con este último valle-ayuntamiento.
De N a S se distinguen en su término: el borde meridional de Andía, fallado (Garindo, cerca de la muga, 1.006 m; Ichurroch, 981 m), el fondo del diapiro, con arcillas abigarradas, yesos, sales y algunos importantes afloramientos de ofitas, y la banda de materiales detríticos (conglomerados, areniscas y arcillas de Oligoceno-Mioceno) que culminan en Esparaz a 1.019 m.
Clima y vegetación muestran afinidades submediterráneas en el N y O y mediterráneas en el resto. Los principales valores medios anuales son: 10°-12° C de temperatura, 800-1.400 mm de precipitaciones, caídas en 100-140 días, y 550-650 mm de evapotranspiración potencial. La encina es el árbol dominante (aún hay 289 Ha), seguida del roble y el quejigo. También se encuentran pinos de repoblación y chopos.
La actividad agropecuaria ocupa al 80% de la población activa del municipio, si bien, únicamente el 50% de la población ocupada en éste lo hace como dedicación principal.
Las plantas forrajeras, y en especial la alfalfa, ocupan el lugar más destacado entre los cultivos, le siguen los cereales de secano (cebada y avena); patata, alholva, y diversas hortalizas de regadío ocupan lugares muy secundarios. Los cultivos leñosos se reducen a algunos cientos de frutales diseminados; la vid, que ocupó antes de la filoxera 24 Ha, casi ha desaparecido, lo mismo que el olivo, aunque éste siempre fue muy escaso. La roturación de nuevas tierras elevó la superficie cerealista cultivada en secano de 335 Ha en 1891 a 425 en 1950, para después ir descendiendo. El ganado de labor es casi inexistente, se limita a dos cabezas de mular, mientras que en 1935 había 87 bueyes y vacas de trabajo y 61 yeguas y caballos. En 1982 el resto de la ganadería lo componían 94 cabezas de caballar, 269 reses bovinas, 1.248 ovinas de raza churra, 67 cabras, 769 cerdos y 12.450 aves de corral. Hubo una Cooperativa Agrícola-Caja Rural fundada en octubre de 1932.
El terreno comunal ocupa 847 Ha (59,5% de la superficie censada del municipio) abarcando el 75% de terreno forestal y el 60% del pastizal.
El sector secundario está representado principalmente por la actividad de extracción de sal (unas 13 balsas) y por una empresa el ramo de la construcción, que ocupan conjuntamente a 15 personas, si bien más de la mitad trabajan en la extracción de sal de modo temporal y como actividad subsidiaria de otra.
El sector servicios emplea a 9 personas empleadas en 6 establecimientos. Abarca las actividades de: comercio, venta de bebidas, reparación de vehículos, administración local, sanidad y servicios personales.
La población activa de Salinas de Oro se elevaba en 1984 a 44 personas, de las cuales 5 estaban en paro y 4 tenían su puesto de trabajo fuera del municipio.
Desempleo registrado (31.3.1987): 13 personas.
Presupuesto municipal (1987): 8.643.000 pts.
Heráldica municipal
Trae de gules y un león rampante de oro coronado de lo mismo. Por timbre un yelmo empenachado.
Casa Consistorial
Fue reformada totalmente entre 1981 y 1982, y sus características arquitectónicas son las propias de la zona en que se integra. Es un edificio construido en piedra y que se eleva en dos plantas. El Ayuntamiento está formado por alcalde y cuatro concejales.
Sus vecinos labradores pagaban la pecha al obispo de Pamplona, que se la rebajó en 1165. En los siglos XIII y XIV disfrutaban de bienes en el término de San Miguel in Excelsis, el monasterio de Iranzu y el de Irache que poseía unas salinas. El obispo redujo (1434) el número de beneficios de su iglesia de San Miguel.
Contaba en 1366 con 28 fuegos que habían aumentado a 46 en 1427, incluidos 9 hidalgos; eran 59 en 1553 y 47 en 1646. Tenía 473 habitantes en 1786 y 578 en 1857.
La catedral de Pamplona poseyó el castillo de Oro por donación del rey García Ramírez (1135). Usurpado por Sancho VII el Fuerte, fue devuelto (1256) por Teobaldo II, pero luego tornó definitivamente a la corona (1291).
Su historia administrativa fue la de Guesálaz*, valle del que se separó en 1852, año en que Salinas pasó a constituir ayuntamiento separado. El abad de la parroquia era el obispo de Pamplona, aunque quienes la servían directamente eran un vicario, cuatro beneficiados y dos sacerdotes. En 1847 el párroco era propuesto por los vecinos, en tanto que los beneficiados (entonces sólo tres) los nombraba el obispo.
En este último año, por otra parte, Salinas contaba con escuela, dotada con cien robos de trigo; funcionaba un molino harinero.
Parece que fue por la segunda mitad del XIX cuando comenzaron a explotarse sus minas de carbón piedra 3 con 124 pertenencias en los años veinte de nuestra centuria. En estos años el carbón se exportaba a Logroño, Zaragoza, Álava y Guipúzcoa, además de la propia Navarra y se ponían grandes esperanzas en la construcción del ferrocarril Pamplona-Logroño, que debía facilitar su salida.
Palacio
No aparece relacionado en la nómina oficial del reino, ni en el informe que sobre los de cabo de armería hizo la Cámara dé Comptos en 1723. Sin embargo, era una construcción torreada, con marcado aspecto de fortificación. En el siglo XVIII pertenecía a la casa ducal de Granada de Ega. A fines de dicho siglo no tenía privilegio, prerrogativa ni exención, aunque sí capilla propia en la parroquial y su carnario. Por esas fechas gozaba también del derecho de llamamiento a cortes.
El Libro de Armería, del siglo XVI, recoge el escudo de armas del palacio de Oro: tres fajas de azur en campo de oro.
Arte
La Parroquia de San Miguel es un edificio del siglo XVI, aunque profundamente transformado en época barroca. Presenta nave única de cuatro tramos, crucero con brazos poco profundos y cabecera pentagonal, cubriéndose tal espacio por bóvedas barrocas de medio cañón con lunetos, salvo el tramo central del crucero que recibe una media naranja sobre pechinas. La cabecera, dada su especial disposición, tiene una bóveda gallonada. Todas estas cubiertas descansan en una cornisa decorada por placas geométricas. Desde el brazo del crucero del lado del Evangelio se accede a unas dependencias a través de una puerta de arco apuntado con baquetón de basas y capiteles poligonales, que pertenece al edificio del siglo XVI, lo mismo que el escudo que hay sobre ella. Sus exteriores muestran muros de sillarejo con sillar en el basamento, esquinas y contrafuertes; éstos adoptan la típica disposición diagonal del siglo XVI, tanto en la cabecera como en los pies. Una sencilla portada de arco de medio punto, bajo pórtico barroco de ladrillo, se abre en el muro de la Epístola. En el lado opuesto queda una torre del siglo XVII, es una estructura cúbica de sillarejo y sillar con dobles medios puntos en uno de sus frentes.
El interior de la iglesia lo preside un grandioso retablo mayor que en 1576 fue encargado a Juan I Imberto, aunque también intervino en él su hijo Pedro. Obra típica de un romanismo temprano, aún con resabios platerescos, ofrece una traza sumamente compartimentada con tres cuerpos divinos en tres calles y cuatro entrecalles y un ático de parecida composición. Columnas acanaladas con el tercio inferior decorado o liso y pilastras de fustes repletos de adornos articulan la mazonería, al tiempo que constituyen su principal ornato, junto a frontones y veneras. Tal arquitectura acoge una compleja iconografía de bultos y relieves, se desarrollan ciclos sucesivos de la Pasión, historias de la vida de la Virgen y San Miguel, entremezclándose con ellos imágenes de Apóstoles, Padres de la Iglesia y otros santos, culminando el conjunto el Calvario y el busto del Padre Eterno. Contemporáneo del retablo es el sagrario, fechado en 1575, que a su vez incluye un relieve con la institución de la Eucaristía. Sobre él monta un expositor de la primera mitad del siglo XVII. En la cabecera también se localiza una talla de la Virgen sedente con el Niño, conocida bajo la advocación del Rosario. Es una obra hispano-flamenca de finales del siglo XV o comienzos del XVI con ropajes de pliegues angulosos y rostro de rasgos geométricos y carnes blandas. De idéntico estilo y cronología es la talla de Santa Catalina existente en el retablo del Sagrado Corazón, altar que también alberga una talla de Santa Bárbara de mediados del siglo XVI. El retablo del Santo Cristo responde a un típico diseño de la primera mitad del siglo XVII y consta de único cuerpo con columnas de fuste entorchado y acanalado. Sirve de titular un Crucificado romanista que puede relacionarse con la producción de Bernabé Imberto. El tesoro parroquial comprende diversas piezas de plata, sobresaliendo una crismera de estilo bajorrenacentista de la primera mitad del siglo XVII y un cáliz rococó.
En las inmediaciones del pueblo se localiza la ermita de San Pedro, construcción protogótica de comienzos del siglo XIII formada por una nave de sillarejo con techumbre de vigas y un ábside semicircular cubierto por cuarto de esfera, al que se accede a través de un arco apuntado. Su portada de medio punto es del siglo XVI. Más distante se encuentra la ermita del Salvador, edificio de origen románico con ábside semicircular, actualmente en estado ruinoso. A esta misma época se remonta la ermita de San Jerónimo, también con ábside semicircular, emplazada en un pintoresco lugar de un monte vecino al despoblado de Viguria. Su interior se enriquece con un retablo barroco del siglo XVIII.
En esta villa abundan las casonas del siglo XVI con muros de sillarejo y cadenas de sillar, abierta en amplios portalones de medio punto guarnecidos de grandes dovelas. Muchas de ellas ostentan blasones barrocos o rococó. Dominando el núcleo urbano, en la parte más alta del pueblo, se hallan las ruinas del antiguo palacio de los Goñi.
Toponimia menor
Agazpe, corral; Corral, corral; Dorrecua, bordas; Gruta, gruta; Ichurroch, alto; Loquesinecua, borda; Marquisa, corral; Mu, borda; Salinas, salinas; San Gregorio, ermita; San Pedro, ermita, el Solo, borda.