CAJA RURAL DE OLITE
CAJA RURAL DE OLITE
Asociación de agricultores de Olite de responsabilidad solidaria e ilimitada* para favorecer el desarrollo del crédito y el fomento de la agricultura. Se constituyó el 10 de enero de 1904 con sesenta socios, en su mayor parte modestos agricultores. El verdadero artífice fue Victoriano Flamarique*, párroco de Santa María de Olite. El triunfo de la Caja Rural de Olite y de sus secciones cooperativas significó el lanzamiento del asociacionismo agrario navarro y fue el modelo a imitar. A partir de la Caja Rural surgieron cooperativas de consumo y de producción que hicieron de Olite ejemplo del cooperativismo católico no solo de Navarra sino de España.
La caja admitía imposiciones ordinarias y pagaba un tres por ciento de interés y extraordinarias a un cinco por ciento. Con este capital obtenido, prestaba a bajo interés, con los menores trámites y formalidades posibles y aplazaba su entrega hasta la recolección de la cosecha. Con este sistema se pretendía que el agricultor olitense tuviera un capital para replantar las viñas dañadas por la filoxera y comprar el abono necesario para sus cultivos sin recurrir a los préstamos usureros.
La Caja Rural era gobernada por una junta general formada por todos los socios cuyas atribuciones eran:
nombrar al Presidente, consejo de administración y cajero, aprobar el balance anual, acordar la cantidad total de imposiciones a admitir y el interés de los préstamos. El consejo de administración, compuesto por el presidente, vicepresidente, secretario y vocales, aceptaba las cantidades impuestas y otorgaba los préstamos según los límites establecidos por la junta general, realizaba el balance y representaba a la sociedad en todos los asuntos. Además del presidente la figura importante era la de secretario que se encargaba de inspeccionar la contabilidad y el cajero que administraba los fondos y llevaba al día las operaciones de la caja.
Los primeros balances de la Caja Rural de Olite en el mismo año de su fundación daban una idea del desarrollo cada vez mayor que adquiría la citada asociación. En 1905, un año después de su fundación, tenía 250 socios, se habían realizado 718 imposiciones y concedidos 287 préstamos por un valor de 25.000 pesetas. En 1907 había aumentado a 400 el número de socios, las imposiciones sumaban 64.581 pesetas y se habían facilitado 570 préstamos que representaban una cantidad de 60.235 pesetas. El capital de la caja rural fue aumentando en años posteriores; en 1915 las imposiciones superaban las doscientas mil pesetas y en 1920 el millón de pesetas.
No era de extrañar que el aumento de capital fuera aprovechado para la creación de nuevas secciones cooperativas. La primera de ellas fue la cooperativa abonera que funcionó desde 1905 y se encargó de las compras colectivas de abonos no sólo para la Caja Rural de Olite sino para otras sociedades que lo solicitasen. En 1908 participaron cuarenta cajas rurales en la adquisición de abonos. Este servicio se organizó hasta 1910 año en que pasó a ser promovido por la Federación de Cajas Rurales. Los beneficios que obtuvo la Caja Rural con estos suministros fueron importantes y pasaron a engrosar el fondo de reserva.
Asimismo en 1905 los socios de la caja habían adquirido una máquina clasificadora de trigo y se habían arrendado veinticuatro robadas que, divididas en veinte parcelas, se dedicaron a experimentos con nuevos tipos de semillas de trigo.
En 1908 la Caja Rural de Olite se federó con las de San Martín de Unx, Pueyo y Ujué para constituir una cooperativa harinera, con un capital inicial de cien mil pesetas que se denominó “Harinera Navarra”, primera cooperativa de producción de la provincia; su costo fue de 250.000 pesetas y producía un vagón diario de harinas que se vendía una cuarta parte en Navarra y el resto en Cataluña y Levante; en 1913 se había cubierto el capital social. El 13 de septiembre de 1914, como complemento de la anterior, se fundó la panadería cooperativa con un costo de 30.000 pesetas; trabajaban nueve panaderos y se vendía en siete pueblos; anualmente los socios depositaban el trigo necesario para cubrir el consumo de pan. Ambas secciones desempeñaron un papel importante al abaratar el precio del pan en 1915, año de escasez de trigo.
En 1909 se fundó la Electra Caja Rural con la adquisición de un motor que suministraba luz a los socios, al Ayuntamiento y a gran parte de la ciudad. Años más tarde, al hacerse insuficiente, la Caja Rural compró la Central Puente de Jesús en la foz de Lumbier por 133.000 pesetas, un molino en Gallipienzo por 40.000 pesetas e instaló una nueva central cuyo costo ascendió a 600.000 pesetas y suministró luz a varios pueblos.
La labor de Victoriano Flamarique* y la Caja Rural de Olite se hizo realidad en la consecución de una obra principal: La Bodega Cooperativa Olitense. Después del desastre de la filoxera algunos jornaleros olitenses debido al aprovechamiento de los comunales y a los préstamos, habían plantado vides americanas y se convirtieron en viticultores propietarios; sin embargo estaban obligados a vender la uva en malas condiciones. El 28 de mayo de 1911 se fundó la Bodega Cooperativa con 240 socios; primeramente se alquiló una bodega y posteriormente se levanto una nueva con capacidad para 200.000 decalitros, que costó 500.000 pesetas. Posteriormente, en 1918 se fundó una pequeña fábrica de alcoholes que proporcionaba más de 4.000 pesetas anuales de beneficios. En 1920 se organizó, junto con las bodegas de San Martín de Unx y Villafranca, la Federación de Bodegas Cooperativas de Navarra y se constituyó la Sociedad Bodegas Iruña con un capital de un millón de pesetas, con el objeto de abrir nuevos mercados en el extranjero.
Completan las obras de Olite la fundación de una sección denominada Trilladora Sindical en 1919 cuyo objeto fue adquirir las trilladoras necesarias para los socios de la caja rural; para ello los agricultores se dividían en tres grupos y para cada uno de ellos la Caja Rural compró una trilladora, que se amortizaba con el pago de un 6% del cereal obtenido.
En 1922 el valor aproximado de las obras de Olite era: Edificio social 124.000 pesetas; mobiliario de la caja rural 9.000 pesetas; útiles de la primera bodega cooperativa 90.000 pesetas; Harinera Navarra 250.000 pesetas; centrales eléctricas 800.000 pesetas; instalación de la red eléctrica 311.000 pesetas; nueva bodega cooperativa 500.000 pesetas; tres trilladoras 70.000 pesetas; útiles de panadería 22.000 pesetas y fábrica de alcoholes 25.000 pesetas.
Poco tiempo después las cooperativas de Olite desaparecieron. En 1921 se vendieron dos partidas de vino a Cuba en un intento de buscar mercados y no fueron pagadas; los socios de la caja rural no haciendo caso de los consejos de Victoriano Flamarique retiraron el dinero de la caja y posteriormente se vendieron las obras de Olite, terminando en fatal desenlace las cooperativas modélicas del asociacionismo agrario navarro.
Bibliografía
V. Flamarique, Conferencia pronunciada en la Semana alavesa agropecuaria (Vitoria 1923, Imprenta Moderna). J. Ruiz de Arcaute, Las cajas rurales navarras 1900-1912 (Madrid 1978, tesis de licenciatura). J. Pejenaute Goñi, Desarrollo del cooperativismo agrario navarro de la Federación a la Confederación (1910-1917) (Madrid 1981, tesis inédita de licenciatura).