SEDIMENTACIÓN
SEDIMENTACIÓN
Deposición del material que está en suspensión en un fluido. Se produce al cambiar las condiciones de éste, generalmente por pérdida de energía, al pasar un líquido de estar en movimiento por efecto de una corriente a un estado de reposo por estancamiento.
Este fenómeno da lugar a la formación de las rocas sedimentarias, adquiriendo en geología un sentido más amplio, se distinguen varios tipos de sedimentación:
Sedimentación mecánica. Supone el asentamiento gravitacional de los detritos rocosos acarreados por las corrientes fluviales y del material orgánico procedente de la propia cuenca sedimentaria, producido por la muerte de los organismos vivos. Este tipo de sedimentación se produce a menudo en los medios sedimentarios continentales y en los bordes de las grandes cuencas marinas. Las terrazas fluviales constituyen un ejemplo de sedimentación mecánica.
Sedimentación química. Se produce por la deposición de las partículas sólidas formadas por precipitación química en las soluciones acuosas. La depresión del Ebro* constituye un buen ejemplo de este tipo de sedimentación, al menos en su zona central, al haberse formado gran parte de las rocas que la componen por precipitación de sulfato cálcico por evaporación de parte del agua en que estaba disuelto y quedar rebasada su solubilidad. De esta manera se han formado las grandes acumulaciones de yesos* que pueden observarse en la zona de la Ribera de Navarra (Falces, Peralta, etc.).
Las rocas calizas se forman también en muchos casos por sedimentación química, al precipitar el carbonato cálcico disuelto en el agua por efecto de una reacción química o por evaporación. (calizas*, areniscas*, yesos*).