Gran Enciclopedia de Navarra

  • Inicio

EL TRADICIONALISTA

EL TRADICIONALISTA

Nombre con el que aparecieron varias publicaciones en España y América, vinculadas al carlismo o al tradicionalismo. Con el subtítulo de “Diario de Pamplona”, se inició el 16.10.1886, la publicación de “El Tradicionalista”, como órgano del partido carlista de Navarra, dirigido por Francisco María de las Rivas. En su primer número proclamó como su objetivo que “combatir el liberalismo es en nuestro tiempo el único modo eficaz de defender las libertades sociales representadas en nuestro antiguo régimen foral”. El periódico incluía generalmente largos artículos doctrinales, religiosos y políticos, escritos por tradicionalistas a ultranza. Su rector era abiertamente nocedalista y la publicación evolucionaría hacia el integrismo. Proclamaba también cómo “hay que proseguir la historia verdaderamente castiza y católica, eslabonando y fundiendo lo bueno, aceptable y legítimo de nuestro tiempo, con todo aquello que nos puso en la cumbre de la grandeza y de la gloria”. Su periodicidad fue diaria -es el primer diario carlista en Navarra-, exceptuando los siguientes a los festivos. Bien compaginado, incluía sección editorial, sueltos de actualidad, noticias, carta de Madrid, revista de la prensa española y extranjera, cultos, gacetillas, notas locales, variedades, folletín y telegramas de última hora, con despachos de la agencia Fabra, además de publicidad. Se publicaba en tamaño de 48 x 33 cm a 4 columnas y tenía el domicilio social en San Antón I, bajos. Al estallar en 1888 la polémica entre la prensa carlista, que culminó con la escisión nocedalista, se alineó con el integrismo y fue desautorizado como órgano del carlismo, que fundó un nuevo periódico, “La Lealtad Navarra*”.

Las acusaciones de Ramón Nocedal en “El Siglo Futuro” contra Carlos VII, a quien se llegó a acusar de liberal, fueron asumidas por “El Tradicionalista”. El diario publicaba cartas de adhesión a su línea, que era compartida por 21 periódicos, que terminaron separándose del carlismo oficial. La discusión tuvo un origen esencialmente religioso, pero derivó en una escisión política, calificando los integristas a Carlos VII no como rey, sino como Duque de Madrid. Tras el manifiesto de Burgos, se consolidó la división nocedalista. Los “íntegros” tampoco reconocían la monarquía constituida, trasladando a la Iglesia el poder político. En 1889 se fundó el Partido Integrista, con el fin de implantar en el mundo el reinado de Cristo-Rey y de modo visible el del Papa. En 18.7.1888 fue desautorizado “El Tradicionalista” por Simón Montoya. No terminaron aquí las peripecias de este periódico, ni de su director, al surgir (1893) diferencias entre Francisco María de las Rivas y “El Siglo Futuro”, al seguir “El Tradicionalista” la postura de los periódicos patrocinados por Campión* y aceptar la monarquía constituida, sin reconocer por ello el liberalismo. Este enfrentamiento desligó al diario de los integristas. Al no contar con el apoyo de ningún partido, “El Tradicionalista” dejó de publicarse el 6.10.1893. El carlismo propició como su nuevo órgano, en 1888, “La Lealtad Navarra“*, mientras que los integristas publicarán, en octubre de 1894, como su nuevo medio periodístico, “La Tradición Navarra“*.

Voces relacionadas

    • EL PENSAMIENTO NAVARRO
    • EL ARALAR

Galería imágenes

    El Tradicionalista

    El Tradicionalista

    El Tradicionalista. Antiguos talleres de la calle San Antón

    El Tradicionalista. Antiguos talleres de la calle San Antón

Documentos gráficos

    No existen documentos gráficos relacionados.

@ Fundación Caja Navarra