JUANA III

JUANA III

(Fontainebleau, 7.1. 1528-París, 5.6.1572). Reina de Navarra, hija de Enrique II y Margarita de Angulema, soberanos de los territorios bajonavarros. Nació prácticamente prisionera de su tío Francisco I de Francia, quien la mantuvo a su cuidado para evitar un posible matrimonio con un príncipe castellano que resolvería el problema de la división territorial de Navarra. Permaneció bajo la tutela de Madame de Silly en el castillo de Plessis-lès-Tours, y tras dos años con su tía Isabel de Albret, se le permitió volver con sus padres, previa concertación de su matrimonio con el duque de Clèves (Châtelleraut, 1540); obtuvo la anulación pontificia (1545) y se casó con Antonio de Borbón*, frente a la candidatura del futuro Felipe II de España (1548). Su nuevo marido inició una política de acercamiento a Enrique II de Francia, con la incorporación del Bearn a la corona gala, a cambio de territorios del centro; la oposición de la reina Juana, con todo Bearn en armas, obligó a ambos monarcas al cambio de planes.

Inmersa en las luchas cívico-religiosas que se sucedieron en Francia tras la muerte de Enrique II (1559) y las regencias de Catalina de Médicis, Juana ha sido considerada, quizá de forma exagerada, la abanderada de las fuerzas calvinistas. Como su madre, que se vio atraída por el instinto de renovación encarnado en Lutero, Juana pasó también por un periodo de conversión, del que habló en sus Memorias. Consideraba, en definitiva, que Navarra debía mantenerse neutral si quería subsistir; y mantuvo los principios de reforma y libertad religiosa en sus dominios. Su marido cambió repetidas veces de bando, y falleció defendiendo la causa católica (1562); en los momentos de crisis, Juana apeló a Roma, y pidió a sus obispos que explicaran al concilio de Trento que las negociaciones con el partido reformado sólo pretendían evitar la guerra civil en su reino. Pretendió igualmente la reunificación de Navarra, pero las negociaciones con Felipe II, en las que se planteó incluso una colación con Castilla y compensaciones en Cerdeña o Túnez para Antonio de Borbón, fracasaron.

Pese a sus esfuerzos por mantener alejado a su hijo Enrique, más tarde rey de Francia, de la corte de París, se vio obligada, finalmente, a negociar con Catalina su matrimonio con Margarita de Valois (1572); durante su estancia en la capital francesa enfermó de tisis; aunque algunos han considerado un posible envenenamiento por orden de la regente. Falleció en el palacio del cardenal de Chatillon. Enterrada inicialmente en Vêndome, fue finalmente trasladada a Lescar, junto a su padre. De su matrimonio con Antonio de Borbón tuvo dos hijos, Enrique III* (IV de Francia) y Catalina; otros dos, los primeros, fallecieron prematuramente.

Cabe destacar su faceta literaria; aparte de editar las obras de su madre, escribió unas Memorias (La Rochela, 1563-1568) y obras poéticas, de las que sólo se conservan cuatro sonetos dedicados a Du Bellay.

Fue, aparte de reina de Navarra, condesa de Foix y de Bigorra y vizcondesa de Bearn.

Bibliografía

Barón de Ruble, Mémories et Poésies de Jeanne d´Albret, (París, 1893). M. Soulice, Ordonnances de Jeanne d´Albret, “Buil de la Soc. de l´Hist du Prot. Français”, (1891). L. Ravenel Lettres de Jeanne d´Albret, “Bull. Soc. Hist. de France”, (1835), T. II, p. 163-76. Cartas escritas desde La Rochelle, 1569, en la British Library, ficha de biblioteca nº. 1058. b.23. Lettres et Remonstrances, (1569), British Library, ficha 285. e.41. N. Weiss, Une Chanson de Jeanne d´Albret, “Bull. de la Soc. de l´Hist. du Protest”, (1894), p. 526-628. M.G. Fawcett, Five Famous French Women, (Londres, 1905) (incluye a Margarita de Navarra y a Juana de Labrit). Yon Oria, Calvino y la Corte de los Labrit de Navarra, (), (1984), pp. 517-525. Marqués de Rochambeau, Antoine de Bourbon et Jeanne d´Albret, (París, 1879). A. de Ruble, Le Mariage de Jeanne d´Albret, (París, 1877); Jeanne d´Albret et la guerre civile, (París, 1897) y Antoine de Bourbon et Jeanne d´Albret, París, 1881.