ESPELEOLOGÍA
ESPELEOLOGÍA
Estudio de las cavidades naturales; se aplica también al aspecto deportivo de descender y explorar las simas o grutas. Normalmente se conjugan los dos aspectos, el deportivo y el científico, en relación con la geología, hidrología, biología, topografía, mineralogía, climatología, arqueología, etc., a las que aporta datos de interés, de difícil obtención, sobre aspectos subterráneos.
En Navarra, debido a la abundancia de rocas calizas y dolomíticas, especialmente en su mitad Norte, donde se dan con mayor frecuencia las cavidades importante, la espeleología ha tenido un importante desarrollo en el siglo actual. Aunque las primeras exploraciones fueron descritas en 1894 por J. Iturralde y Suit*, sólo a partir de 1920 se iniciaron los trabajos en diferentes zonas del Pirineo navarro.
El estudio de las distintas cuevas de Navarra ha estado motivado por diversos aspectos, pero cabría destacar el arqueológico (en más de 100 cavidades se han detectado restos arqueológicos), los recursos hidráulicos subterráneos y el específicamente deportivo.
Las exploraciones sistemáticas comienzan en 1948, fundamentadas en un importante núcleo de espeleólogos, en torno a los cuales nacería en 1953 el Grupo Espeleológico de la Institución Príncipe de Viana.
Desde esta fecha y bajo los auspicios de la Diputación Foral de Navarra, se ha desarrollado una importante labor de detección, exploración, estudio y catalogación de las cavidades más importantes (más de 1.500), creando un importante archivo, del que se han publicado algunos resúmenes, especialmente el Catálogo espeleológico de Navarra.
Los macizos más interesantes son el de Larra, con más de 500 cavidades inventariadas, los de Aralar y Urbasa con unos 200, el de Andía con unos 150, los de Leire, Claiz, Abodi-Berrendi, etc. También existen algunas cuevas, aunque de menor importancia, en las zonas de yesos de la mitad Sur de Navarra.
El macizo de Larra, por sus especiales características, es anualmente visitado por múltiples expediciones de carácter internacional, atraídas por la belleza, interés y magnitud de las simas allí existentes; la 2ª y 3ª simas más profundas del mundo se encuentran en este macizo (Sima de la Piedra de San Martín* y Sima Illaminako-ateak*). Debido a su importancia y a su condición de macizo que se adentra en dos países (Francia y España), se creó en 1965 la Asociación de Recherches Espeleologiques Internationales de la Pierre Saint Martin (ARSIP), que regula las expediciones y recopila la información obtenida.
En la actualidad existen grupos espeleológicos que trabajan en la exploración de distintas zonas de Navarra, en Pamplona, Estella, Echarri-Aranaz, Viana, Lumbier, y Lecumberri.