CONFEDERACIÓN NACIONAL CATÓLICA AGRARIA
CONFEDERACIÓN NACIONAL CATÓLICA AGRARIA
Asociación de federaciones católicas sociales de cajas rurales y sindicatos agrícolas de las provincias españolas con el objeto de realizar compras colectivas a gran escala, organizar agencias comerciales, facilitar crédito y seguros agrarios y disponer de un amplio servicio de asesoramiento y propaganda. Se constituyó en 1917 y la Federación Navarra* acordó formar parte de la misma y enviar a su Presidente Esteban Deán para asistir al acto de constitución.
Para el cumplimiento de sus objetivos la Confederación estableció las secciones de comercio, crédito, propaganda, secretariado y seguros. Las federaciones asociadas tenían derecho a utilizar todas las ventajas que proporcionaba cada sección, a formar parte de las juntas generales y a procurar la acción común en la defensa de los intereses colectivos de la Confederación y de las federaciones. Respecto a los deberes, las federaciones tenían obligación de asistir a las juntas generales, de contribuir al sostenimiento de la obra con una cuota anual y de presentar una memoria anual de su actuación acompañada de un balance económico.
En cuanto al régimen de gobierno, la Confederación se regía por una junta general y un consejo directivo. La junta general, compuesta por un representante de cada federación se reunía una vez al año en sesión ordinaria y tomaba los acuerdos por mayoría. El consejo directivo, compuesto por el presidente, vicepresidente, tesorero, secretario, consiliario y cinco vocales, se reunía dos veces al año y se renovaba cada dos años; tenía, entre otras, las siguientes atribuciones: admitir a las federaciones, resolver los asuntos de urgencia, ejecutar los acuerdos, convocar a la junta general, estudiar las iniciativas de las federaciones, nombrar los jefes de las diferentes secciones, dar cuenta a la junta general de su actuación por medio de una memoria anual, procurar la solución de problemas entre federaciones y fomentar la cultura social agraria.
Varios años transcurrieron hasta hacerse realidad la Confederación. En enero de 1912 los católicos sociales dirigidos por el padre Antonio Vicent se reunieron en Valencia y acordaron proponer a las federaciones la constitución de la Confederación; la respuesta de la Federación Navarra dada por Victoriano Flamarique*, basada en la falta de madurez y solidez de las federaciones en esos años, fue negativa. En 1915 se unieron las federaciones de Castilla y León y el Cardenal de Toledo fundó el Secretariado Nacional Agrario prólogo de la Confederación. A partir de esta fecha Antonio Monedero y el padre Nevares realizaron una intensa propaganda que culminó con la constitución del organismo confederal. La Federación Navarra en sesión celebrada el 3 de agosto de 1917 acordó formar parte de dicha Confederación. En 1922 agrupaba a cincuenta y siete federaciones, cuatro mil sindicatos y mil setecientas cajas rurales y los préstamos a los agricultores suponían trescientos millones de pesetas. En los años posteriores la obra se consolidó y en 1940, una vez terminada la Guerra Civil, se incorporó a la Unidad Sindical y en 1942 se llamó Unión Nacional de Cooperativas del Campo*.