RATA
RATA
Esta acepción, utilizada frecuentemente con ambigüedad, engloba dos especies de roedores*. La rata campestre (Rattus rattus) y la rata común (Rattus norvegicus).
Ambas especies son de origen asiático y su introducción en nuestra región tuvo lugar en tiempos históricos. Las dos especies viven normalmente en lugares humanizados, aunque en áreas de clima suave. La rata campestre puede instalarse en hábitats naturales, normalmente en las cercanías del agua. La rata común muestra preferencia por los lugares húmedos con fuerte contaminación.
La rata campestre se diferencia exteriormente de sus congéneres por el mayor desarrollo de las orejas y la cola.
Son especies de alimentación omnívora y con una estructura social compleja, lo cual les ha permitido desarrollarse con éxito a pesar de la persecución constante por parte del hombre.
Ambas especies son responsables de las epidemias de peste ocurridas en la historia de nuestro continente. Son portadoras habituales de un gran número de enfermedades, implicando siempre un alto riesgo de contaminación para los alimentos u otros artículos que estén expuestos a su actividad.
Las ratas pertenecen a la familia de los múridos y no deben de confundirse con la Rata de agua*, roedor perteneciente a los cricétidos y que presenta considerables diferencias anatómicas y biológicas con aquéllas.