OÑA, SAN SALVADOR DE
OÑA, San Salvador de
Monasterio burgalés fundado en 1011 por el conde castellano Sancho García con carácter dúplice. Sancho III el Mayor lo hizo exclusivamente masculino y lo reformó (1032), tareas encomendadas presumiblemente al abad Paterno. Su más famoso abad y principal impulsor de su crecimiento fue San Íñigo (1034-1068). Los monarcas pamploneses se sirvieron de este cenobio para consolidar su dominio en Castilla la Vieja, transitoriamente unida a su corona (1035-1054). Oña creció durante todo el siglo XI hasta formar el señorío monástico más importante de Castilla, con 300 iglesias y 70 monasterios. Entró en crisis en el siglo XIV y no se recuperó hasta su unión a la congregación de San Benito de Valladolid (1506). Conserva los restos mortales de Sancho Garcés III el Mayor*.