SÁNCHEZ SALVADOR Y BERRIO, MANUEL PEDRO
SÁNCHEZ SALVADOR Y BERRIO, Manuel Pedro
(Pamplona, 1764 – Portugal, 1813). Poeta, militar y político. Hijo de Manuel Domingo Sánchez-Salvador*, recibió una sólida formación humanística e inició la carrera militar en el regimiento de infantería de Murcia (1780); intervino en la toma de Menorca (1782) y en el sitio de Gibraltar (1782); Volvió a Navarra, y en Sangüesa le sorprendió la crecida del Aragón (1787) y formó parte de la Junta de Policía encargada de vigilar el proyecto de reconstrucción de la ciudad. Después recibió de unos tíos el mayorazgo de los Rodríguez de Arellano y de Berrio (1788). Fue miembro de la Junta de Abastos de Aoiz (1797), cuya alcaldía ostentó en cinco años (1799, 1800, 1803, 1805, 1810), cargo del que dimitió por enfermedad (septiembre 1810) y se trasladó a Sangüesa. Fugitivo y perseguido por los franceses, según su esposa, Antonia Aleja Rodríguez Barrenechea (riojana de Ezcaray), se refugió en Portugal. En agosto de 1813 sus hijos se hicieron cargo de la herencia del padre, cuya muerte declaran.
Sánchez-Salvador y Berrio escribió Noche fúnebre (Pamplona, 1788), elegía que describe la inundación de Sangüesa con sobriedad y contención clásicas, alejadas del tono mitológico y alegórico. La oda González apareció en la edición de Poesías de Fray Diego González (Pamplona, 1796), prior de los agustinos de Pamplona y amigo influyente en los gustos poéticos de Sánchez Salvador. Los primeros poemas en la prensa aparecieron en “Diario de las Musas” (1790-1791). La noche e Ilusiones de la esperanza vieron la luz en la revista “Variedades de Ciencias, Literatura y Artes”, que editaba Quintana, autor de elogiosos comentarios de esos poemas (1804). En la misma revista publicó La guerra. Oda. Al excelentísimo señor Príncipe de la Paz (1806), poesía antibelicista.
José, hijo del poeta, publicó Poesías de Doralio Londres, (1818), cuya portada no lleva el nombre del autor. Los dos volúmenes de la obra recogen la producción poética principal de Sánchez-Salvador: reúne idilios, odas, sonetos, canciones, romances, elegías y una égloga; también poemas traducidos de Gessner, Pope, Leonard, Regnard, Anacreonte. “Doralio” es un seudónimo pastoril con el que el autor ocultó su personalidad, según la costumbre de los poetas bucólicos del siglo XVIII. En Poesías de Doralio encontramos las diversas actitudes líricas de finales de ese siglo: poesía amorosa anacreóntica, filosófica y sentimental de influencia extranjera (Pape, Young, Gessner, Rousseau) y la que defiende las ideas de la ilustración, de cuyos ideales Sánchez-Salvador fue hombre comprometido. Destaca su perfecta asimilación de Salomón Gessner, poeta muy celebrado en su época, cuyos temas -la naturaleza como lugar de perfección para el hombre, corrupción de la vida urbana, afectos familiares, veneración a los mayores, amistad- se funden con los de tradición nacional (Fray Luis de León). La poesía pastoril de Sánchez-Salvador se aleja de lo convencional cuando se inspira en los parajes patrios: río Irati, río Aragón, Arga, Ebro, río Oja. Es evidente su preocupación por crear un lenguaje poético. Su léxico es rico y depurado, de sabor clásico y moderno a la vez: prerromántico, y muestra una gran destreza métrica al utilizar variedad de estrofas y ritmos, destaca el atrevido uso del hipérbaton.
Toda la obra de Sánchez-Salvador ha permanecido oculta hasta nuestros días, pese al aprecio que gozó por parte de importantes poetas de su época.
También publicó la traducción de Arte de hacer el vino (Pamplona, 1803), del francés Cadet de Vaux, editado con apoyo del Reino de Navarra. Póstuma es su traducción de La gastronomía o el arte de comer (Londres, 1818), de J. Berchoux.
Bibliografía
Poesías de Doralio, de Manuel Pedro Sánchez-Salvador y Berrio. Edición, biografía y estudio de Felicidad Patier Torres. (Pamplona, 1987).