EVREUX
EVREUX
Capital del actual departamento francés de Eure. Sobre el centro de convocatoria de un grupo tribal galo (Aulerci Eburovices) se alzó la población romana organizadora del territorio o civitas Ebroicorum. Sede tempranamente de un obispado, quizá desde el siglo IV, su área de influencia configuró luego (hacia el año 990) un condado en el marco feudovasallático del ducado de Normandía. Lo rigió una dinastía privativa hasta su primera incorporación a los dominios directos de la Corona francesa (1200) por obra del rey Felipe II Augusto. Felipe IV el Hermoso, esposo de Juana I de Navarra, lo encomendó (1298) a su hermanastro Luis, fruto de las segundas nupcias de Felipe III el Atrevido con María de Brabante. De su matrimonio con Margarita de Artois engendró el conde Luis de Evreux a Juana, esposa de Carlos IV de Francia (I de Navarra), y a Felipe de Evreux. Este último, heredero del condado y otros señoríos feudales anejos, contrajo matrimonio (1318) con Juana, hija única de Luis X de Francia (I de Navarra).
Extinguida con el citado Carlos IV la línea sucesoria masculina, la Corona francesa recayó en la rama colateral de Valois representada por Felipe VI (1328), pero en Navarra, prevalecieron los derechos de Juana (II) y su esposo Felipe (III) de Evreux. Los nuevos soberanos navarros residieron preferentemente en sus señoríos franceses y en Evreux debió de nacer, por tanto (1337), el futuro rey Carlos II. Comprometido este último en la maraña política francesa de su tiempo, sufrió finalmente la confiscación de todos sus dominios feudales en aquella monarquía, incluido el próspero condado de Evreux (1378). Su hijo Carlos III suscribió (1404) la renuncia definitiva a aquellos lejanos bienes patrimoniales y, en particular, a la ciudad con cuyo nombre distingue la historiografía a la dinastía que ocupó el trono navarro durante casi un siglo.