ENRIQUE IV

ENRIQUE IV

(Valladolid, 1425 – Madrid, 1474). Rey de Castilla. Hijo primogénito y sucesor de Juan II y de María de Aragón, y sobrino por tanto de Juan II de Navarra. Intervino en las luchas nobiliarias castellanas desde 1440, entonces a favor de los infantes de Aragón. Como parte de esta política casó con Blanca, hija de los reyes de Navarra. El matrimonio se disolvió en 1453 tras un largo proceso, mientras Enrique había cambiado de bando y derrotado al rey de Navarra en Olmedo (1445). Abiertas las hostilidades entre Carlos de Viana y su padre, el príncipe navarro aceptó la ayuda que le brindó el castellano (1451) y este llegó incluso a ofrecerle la mano de su hermana Isabel. Invadió entonces Navarra ocupando las plazas de Laguardia, Los Arcos, San Vicente y Viana, en la merindad de Estella, motivo luego de litigio en la Sentencia Arbitral de Bayona. Antes de morir, la princesa Blanca encargó a Enrique el cuidado de su herencia. El se desentendió, sin embargo, de los asuntos navarros después del citado acuerdo arbitral de Bayona (1463), cuyas cláusulas no se cumplieron como se había previsto. El reino castellano retuvo las plazas de Los Arcos, Laguardia, San Vicente y sus respectivas aldeas.