ENEBRO
ENEBRO
Fam. Cupresáceas. Arbolillo o arbusto de hasta 3,5 metros de altura en los enebrales navarros. Presenta porte robusto apiramidado y con abundante ramificación desde la base, cuando se desarrolla en condiciones ecológicas adecuadas. Las hojas son aciculares, pinchudas, con una banda blanca en el envés, carácter que permite distinguirlo del J. oxycedrus, con doble banda estometífera blanca. Se insertan en grupos de tres y son muy numerosas, por lo que el árbol aparece muy tupido. Los conos, gálbulos, son redondos y de color negro azulado en la madurez, con un recubrimiento céreo característico.
Es planta heliófila que abunda en la Navarra Media y en la Montaña, especialmente en su mitad Oriental. Hacia la Navarra Húmeda, menos luminosa, es planta rara. En la Ribera no está. Puede vivir sobre rocas calizas o silíceas y sobre suelos diversos, incluso los poco evolucionados, pero no soporta los encharcados o con nivel freático elevado. Tiene gran interés en la regeneración de los bosques de quejigos y carrascas. Tiende a ampliar su área y abundancia cuando el paisaje está modelado por la ganadería y el fuego. Además de la ssp. communis, en Navarra existe la ssp. hemisphaerica en el área de la montaña roncalesa. Se distingue por las hojas y la banda estomatífera, más anchas. Adquiere frecuentemente un porte rastrero y sube por las laderas pendientes hasta los pastos de los rasos supraforestales ya por encima de los 2.000 metros. Más rara parece la ssp. nana, de porte reducido y hojas menores que habita en los pastos cacuminales.
El Juniperus oxycedrus es un árbol de porte piramidal de hasta 10 metros de altura, aunque por lo común no supera los 6 metros en Navarra. Es similar al J. communis pero su ramificación es más laxa y menos tupida de hojas. Estas son aciculares, poco pinchudas y se insertan agrupadas por 3. Los conos maduros, los gálbulos, son de color cuero y lustrosos. Este carácter y el de dos bandas estomatíferas en el envés, permiten distinguirlo de su congénere. Es planta friolera que busca la luz y resiste la sequía, por lo que no aguanta en el interior del bosque. En su distribución por Navarra evita la Montaña. Su carácter xerotermófilo se manifiesta claramente por ser paulatinamente más abundante a medida que avanza hacia la Ribera. Allí entra en contacto con los pinares de carrasco y la sabina, en todo tipo de exposición y suelos, salvo en los encharcados o salinos.
En la zona media y en la Navarra húmeda del noroeste se emplea el cocimiento de los frutos, a veces con las ramas y hojas, para bajar la tensión, en el tratamiento de edemas, hidropesía y sobre todo en el del reuma; el cocimiento de la corteza se aplica también, en baños y masajes en los “trastornos reumáticos” (Estella). Los vapores del cocimiento de frutos y ramas sirven además para curar las paperas y la tos de los caballos (Eguaras y valles pirenaicos). La literatura científica lo recomienda como diurético y particularmente en el reumatismo.