DÍA DE DIFUNTOS
DÍA DE DIFUNTOS
Festividad celebrada el día 2 de noviembre. Jornada caracterizada antiguamente por los responsos que, a lo largo de ella, rezaban en las iglesias parroquiales y conventuales los sacerdotes seculares y religiosos ante las “fuesas” de cada familia, sobre las que ponían las mujeres la cera, el pan de “olada” (Oblatum=ofrecer), que ofrendaban en las misas. Muchos párrocos de pueblos de la Navarra media mantuvieron la práctica de repartir la “olada” entre los monaguillos y escolares, quienes saboreaban el pan como una golosina.
La costumbre de visitar los cementerios este día para llevar flores a los difuntos es relativamente moderna en Navarra, si exceptuamos ciertos medios urbanos. Los visitantes, se limitaban a rezar ante las sepulturas de los familiares.