COSCULLUELA
COSCULLUELA
Familia de impresores pamploneses. Benito Cosculluela, primero de la dinastía, impresor y mercader de libros, instalado en la calle Zapatería, y desde 1789 en la Plaza del Castillo, empezó a estampar en 1775 y realizó 48 impresiones. Fue elegido tasador de los libros de los Jesuitas a su expulsión de Pamplona. Entre 1784 y 1785 publicó los ocho tomos del Teatro Crítico Universal y los cinco de las Cartas Eruditas (1786-1787), de Benito Feijoo. Imprimió un libro en colaboración con José Longás*, Compendium Salmanticense de A. de San José (1791) y finalizó su actividad tipográfica en 1793 con la obra Hidalguía del Apellido de Larumbe. A su muerte, en 1794, le sucedió su viuda María Josefa Echelu, que trabajó hasta 1795. Con su pie de imprenta se recogen dos impresiones: Hidalguía de los Silvestre de Peralta (1794) y la Novena a Santa Rita de Casia (1795). Le sucedió Miguel Ignacio Cosculluela y Echelu, hijo de los anteriores, último miembro impresor de la familia. Tenía la oficina frente a Santa Cecilia, en donde ejerció su profesión desde 1795 hasta 1809, con un total de 27 impresiones. Sobresalen: Ordo Recitandi Divinum Officium (1795) y Noticias de España. La entrada de José Napoleón I en Madrid (1809).