CARIOFILÁCEAS
CARIOFILÁCEAS
Componen esta familia un conjunto de plantas predominantemente herbáceas, raramente arbustivas. Presentan hojas enteras, normalmente opuestas y soldadas en la base. Ocasionalmente son pecioladas en Stellaria. Las hojas se acompañan de estípulas en el conjunto de especies que constituyen la subfamilia paroniquioideas; las restantes especies alsinoideas y silenoideas carecen de ellas. Las flores generalmente son vistosas y se disponen en florescencias cimosas paucifloras. Son por lo general plantas hermafroditas con el cáliz formado por cinco piezas soldadas en silenoideas y libres en las restantes; la corola está formada por cinco pétalos libres de colores variados, con el limbo entero o a veces desflecado (Dianthus, Lychnis). Los estambres, en número de 10, se disponen en dos verticilos pentámeros; los carpelos, de 2 a 5, constituyen un ovario con una sola cavidad en la que las semillas quedan agrupadas en la zona central; el fruto es una cápsula, raramente es carnoso en el cucúbalo (Cucubalus baccifer). En Navarra esta familia se encuentra extraordinariamente bien representada debido a la diversidad de ambientes ecológicos que la región ofrece y la familia requiere.
Dentro de las paroniquioideas y del género Paronychia con características estípulas nacaradas, están presentes P. capitata y la sanguinaria P. argentes, ambas en comarcas meridionales. Con estípulas algo menos vistosas aparecen P. polygonifolia y P. kapela subespecie serpyllifolia, en la Montaña.
Menos llamativa, por carecer de estípulas membranosas, es la Herniaria; en la región habitan: H. cinerea ampliamente repartida por la mitad sur, H. glabra una planta diurética rara en Navarra y H. fruticosa ligada a los yesos.
Spergularia, a diferencia de los dos géneros anteriores caracterizados por sus flores muy reducidas, presenta flores llamativas de color rosado-rojizo. S. rubra es una especie con reparto amplio que va ligada a los ambientes nitrogenados. S. marina es planta halófila que forma parte de comunidades meridionales de saladares. Dentro de las alsinoideas existe en Navarra un conjunto de especies herbáceas de tamaño reducido y flores poco llamativas; entre ellas, Scleranthus con varias especies que habitan en los suelos pedregosos, S. annuus y S. uncinatus.
Bufonia tenuifolia aparece en los pastos efímeros de la mitad sur. Parecida es la Minuartia hybrida que convive en ocasiones con la anterior. M. mutabilis, M. cerastiifolia y M. verna son plantas de la Montaña, ligadas a los pastos ubicados en los rellanos y fisuras de los cantiles calizos, a partir de los 1.000 m M. campestris alcanza por el sur la Ribera, situándose en los pastos de anuales que pueblan los crestones pedregosos y venteados.
Moehringia se caracteriza por presentar cápsulas con cuatro valvas. En el área norte M. trinervia habita en los claros de los hayedos. Otra especie, M. pentandra, es mucho más rara y salpica los pastos en los claros del matorral subcantábrico.
La pamplina, Stellaria media, es una mala hierba con amplia distribución que caracteriza los ambientes con exceso de fertilidad. S. holostea adorna los setos y orlas espinosas de campos y bosques de la mitad norte. S. alsinea, S. nemorum y S. graminea se ubican en los pastos aguanosos que acompañan a los manantiales y arroyos semisombreados que corren por el interior de los bosques.
Holosteum umbellatum es planta anual, propia de los pastos de la mitad sur; se caracteriza por presentar las flores en umbela terminal. El género Sagina está representado en Navarra por las especies S. saginoides, S. procumbens y S. apetala. Son pequeñas especies procumbentes que viven ligadas a las orillas de los manantiales de montaña y en los valles del área septentrional.
El género Cerastium se caracteriza por presentar cápsulas largas de color pajizo que en la madurez se abren en diez puntas. Reúne en Navarra un variado conjunto de pequeñas especies con ecología diversa. Entre los más extendidos se encuentran C. arvense en los pastos de las montañas y C. glomeratum en los herbazales nitrófilos, C. pumilum y
C. gracile habitan en los pastos efímeros que colonizan suelos juveniles.
La hierba de las piedras, Arenaria grandiflora, y otras especies de este género A. purpurascens, A. montana y A. ciliata están situadas en las montañas. La A. serpyllifolia y A. leptoclados pioneras de los pastos de anuales, cierran el capítulo de las alsinoideas.
Las silenoideas se caracterizan por su cáliz soldado y sus flores vistosas. Lychnis flos-cuculi vive en los prados encharcados y juncales de la Montaña; Cucubalus baccifer está en las alisedas y choperas; Gypsophila hispanica está muy localizada geográficamente y caracteriza algunos afloramientos yesosos del reborde meridional. G. repens es planta de los pastos supraforestales. Puede descender, proveniente de la alta montaña roncalesa, a algunos puntos como el Puerto de Velate. El género Silene se caracteriza por sus cálices ventrudos. La colleja, S. vulgaris, abunda en los prados y pastos de toda Navarra. Otras silenes también de flores dominantemente blancas pero situadas estrictamente en los pastos y roquedos de la Montaña son la hierba de las rocas, S. saxifraga, S. ciliata, S. rupestris, S. pusilla. La S. alba subespecie divaricata aparece restringida al pie de los paredones soleados ya en el domino del carrascal. S. nutans habita en los tomillares subcantábricos, S. gallica y S. nocturna son plantas de los pastos de anuales. Con flores rosas S. acaulis adorna y protege con sus apretadas almohadillas los suelos superficiales del roquedo roncalés; S. rubra es planta esciófila que da color a los prados húmedos o encharcados, zanjas y cunetas de la zona norte de Navarra. S. muscipula es una delicada planta anual de tallos pegajosos y flores de un llamativo rosa; desde el matorral mediterráneo se adentra en las mieses dándoles color.
Petrocoptis pyrenaica es un endemismo pirenaico, estrictamente ligado al roquedo que coloniza las fisuras rezumantes de los extraplomos cueva. En Navarra presenta una gran amplitud ecológica. Desde los 2.000 m de la montaña roncalesa, donde coloniza los roquedos calizos, baja hasta el batolito granítico de Peñas de Aya, su cota inferior altitudinal; con ecología calcícola corre por el cresterío norte de Urbasa-Andía hasta la vecina Álava. Otros géneros; Agrostemma, Vaccaria, Dianthus, Velezia, Petrorhagia y Saponaria pertenecen a esta subfamilia (Neguillón*, Clavel*, Hierba Jabonera*).