BERBINZANA
Categoría histórica: Lugar.
Categoría administrativa: Municipio.
Partido Judicial: Tafalla
Merindad: Olite
Comarca geográfica: Bajo Arga.
Población (1986): 763 de hecho, 794 de derecho.
Superficie: 13,3 km2
Densidad: 574 hab/km2
Altitud en el núcleo de viviendas: 317 m
Distancia a Pamplona: 50 km
Comunicaciones: Carretera local que enlaza con la comarcal NA-132, Estella-Tafalla.
Gentilicio: Berbinzanés.
Geografía
Limita al N con Larraga, al E con Tafalla, al S con Miranda de Arga y al O también con Larraga.
Atravesado de N a S por el Arga y alargado de O a E, es un municipio predominantemente llano, hasta el punto de que la mayor altura tiene 401 m y la menor unos 315 m. Se halla comprendido entre el anticlinal de Tafalla y el sinclinal de Miranda de Arga, y una extensa capa de aluviones cuaternarios (glacis al O del Arga y tres terrazas en ambas orillas pero sobre todo en la izquierda) que cubre gran parte de las arcillas, entre las que se intercalan algunos niveles areniscosos, del Mioceno, que aflora solamente al O.
El clima es de tipo mediterráneo-continental: inviernos fríos, sobre todo con situaciones meteorológicas de N, veranos cálidos y secos, lluvias escasas e irregulares, cierzo frecuente. Los valores medios anuales más importantes son: 13º-14ºC de temperatura: 450-500 mm. de precipitaciones, caídas de unos 70 días: y 725-750 mm de evapotranspiración potencial. Nada queda, si se exceptúa la ripisilva del Arga, de los bosques que hubo antes del poblamiento humano.
Municipio de especialización agraria. En 1984 contaba con 222 puestos de trabajo en la agricultura, 148 de ellos de plena dedicación y otros 74 a tiempo parcial, con actividad principal en la industria, servicios o en trabajos agrícolas por cuenta ajena. Existían 185 explotaciones agrarias, casi todas cerealistas.
La base productiva reside en los cereales, cebada principalmente y en las hortalizas. La tierra de labor cerealista de secano ha aumentado estos últimos años. Ha crecido desde finales del siglo XIX: 248 Ha en 1891, 432 en 1906, 532 en 1920, 615 en 1935, 601 en 1970 y 540 en 1981.
Dentro de las hortalizas destaca, en secano, el espárrago y el tomate en regadío. La superficie de este último ocupa el 25,9% de las tierras de cultivo. Poca importancia alcanza el viñedo y olivo. La extensión que ocupa la vid ha menguado bastante, después de haberse recuperado de la crisis filoxérica: 15 Ha en 1906, 67 en 1920, 103 en 1935, 140 en 1950, 130 en 1961, 120 en 1970 y 49 en 1982, según el Catastro. Y el olivar, que llegó a sumar 10 Ha en 1891, ha quedado reducido a poco más de dos hectáreas. Las plantaciones de almendro han aumentado bastante en los últimos años.
Para trabajar las tierras había en 1939, 81 cabezas de ganado de labor caballar, 35 de mular y 27 de asnal, y en 1982, solo 1, 10 y 3, respectivamente. El ganado más importante es el porcino, con cerca de 1.250 cabezas. Casi en su totalidad se explota en dos granjas especializadas que cuentan con 80 y 50 madres respectivamente.
El terreno comunal abarca 500 Ha (39,31% de la superficie agraria) de las que 180 son tierra de labor de secano y 314 de pastos.
En Berbinzana se fundó una cooperativa Agrícola-Caja Rural el 5 de noviembre de 1905, la Bodega Cooperativa El Ángel de la Guarda el 15 de junio de 1947 y una Cooperativa de Conservas de Frutos y Productos hortícolas el 20 de mayo de 1958.
El sector servicios ocupaba (1984) a 42 personas distribuidas en 27 establecimientos. El comercio ocupaba a 5 personas, en otros tantos centros de trabajo. Las hostelerías y los establecimientos de bebidas, ocupaban a dos personas en dos locales. La reparación de vehículos y el transporte ocupaban a 8 personas en 5 centros de actividad. Otros 5 pertenecen al subsector financiero que empleaba a 9 personas. En administración local, enseñanza y sanidad trabajaban 12 personas distribuidas en cuatro centros y finalmente los servicios personales ocupaban a 6 personas.
El sector industrial empleaba 36 trabajadores, cinco de los cuales pertenecían al sector de la construcción.
La industria manufacturera existente en el municipio pertenecía exclusivamente al sector alimentario, que ocupaba a 30 personas distribuidas en cinco empresas (2 cárnicas, 1 de conservas vegetales, 1 de fabricación de pan y una bodega vinícola cooperativa).
El total de puestos de trabajo existentes en el municipio ascendía en 1984 a 300, cubiertos por 226 personas, ya que había 74 trabajadores con doble ocupación.
Buscaban su primer empleo 30 personas.
Desempleo registrado (31.3.1987).- 14 personas.
Presupuesto municipal (1987) 25.175.000 pts.
Heráldica municipal
Trae de azur y una imagen de Santa María de oro, bajo templete del mismo metal. Estas armas colores se las dio la Diputación Foral cuando la villa tomó el acuerdo de hacer una nueva bandera con armas propias, a fin de asistir a la coronación de Santa María la Real. Figuran en las vidrieras.
Casa Consistorial
Edificio construido en 1911, con dos cuerpos elevados a diferentes alturas. En el ayuntamiento se aloja también el Juzgado municipal y el consultorio médico.
Recientemente se ha llevado a cabo una mejora en el inmueble con importe de 29,3 millones, financiado con ayuda del Gobierno de Navarra. El Ayuntamiento está regido por alcalde y seis concejales.
En su término se encontró un miliario fechado hacia el año 307. También se ha identificado un asentamiento de época romana, posiblemente una “villa”, junto al río Arga.
El primitivo núcleo de población debió de crecer a partir del monasterio de Santa María, dado por el rey García Sánchez III a Santa María de Nájera (1052). El término revirtió al patrimonio de la Corona bajo Sancho VII el Fuerte.
En 1280 los vecinos debían 100 cahíces de trigo y otros tantos de cebada y avena en concepto de pecha, y 50 cahíces y 2 robos de trigo y 93 cahíces de cebada y avena por la “novena”. El rey Luis de Hutín cedió (1307) estas rentas a Ojer de Mauleón. A principios del siglo XV, la villa era señorío de mosén Pierres de Peralta, quien la permutó (1414) a Carlos III por Andosilla, y este mismo monarca liberó temporalmente a los vecinos de sus pechas (1416). El príncipe Carlos de Viana concedió vitaliciamente el lugar a María de Armendáriz (1457), pero sus rentas habían pasado más tarde (1495) al conde de Lerín, que las percibía junto con las de Larraga, a cuya jurisdicción perteneció la villa hasta que se instituyó como municipio propio (1647).
En 1366 contaba con 36 fuegos, todos labradores que habían ascendido a 54 en 1646. Los 404 habitantes de 1786 aumentaron a 672 en 1857.
Tras la incorporación de Navarra a la corona de Castilla, Berbinzana tuvo algunas dificultades para asegurar su carácter de villa de realengo, tal como había sido constituida en 1416, y para mantener los privilegios que le había otorgado Juan de Labrit en 1507. Por una parte, el conde de Lerín pretendió tener derechos sobre la villa, y hubo pleito, que se falló a favor de Berbinzana en 1547. Por otro lado, el propio patrimonio real intentó cercenar las concesiones de 1507, negando a Berbinzana el asiento en Cortes que entonces se le otorgó (y que ocupó realmente en las de Tafalla de 1508) y reclamándole el pago de pechas. Pero también en este caso hubo al menos tres sentencias sucesivas, las últimas de 1579 y 1580, en su favor.
En 1800 ejercía la jurisdicción civil un alcalde y la criminal la Real Corte de Pamplona, en tanto la eclesiástica pertenecía al abad del monasterio de Nájera, que se titulaba simultáneamente abad de la iglesia de Berbinzana y designaba para ésta un vicario y dos beneficiados.
En los años veinte de nuestro siglo contaba con un molino harinero, y una central eléctrica.
Bibliografía
Jesús Chocarro Indurain, Berbinzana, siglo XX (Pamplona, 1984).
Palacio
Hubo en esta localidad un palacio que sin duda existía ya en 1414, fecha en la que mosén Pierres de Peralta se lo reservó, exceptuándolo de la permuta que hizo con el rey de Berbinzana por Andosilla. Carlos III el Noble solía ir allí muchas veces a cazar y a divertirse, y parece que después de 1416 hizo levantar allí un palacio o casa real, tal vez ampliando y, mejorando el que existía con anterioridad.
A mediados del siglo XV lo poseía el Príncipe de Viana, el cual lo donó en 1459 a María de Armendáriz y Francisco de Barbastro. Según el documento de donación, estaba situado el palacio lindante con la casa propia e la abadía de Nájera y con el fosal o cementerio de la iglesia. Tenía el privilegio de asilo y todas las exenciones y preeminencias de los palacios de caballeros y gentileshombres solariegos, entre ellas la del primer asiento en la iglesia. Sin embargo, a la sazón se hallaba quemado y muy derruido, y precisaba urgentes y costosas reparaciones.
Según el Diccionario Histórico de 1802, fue el propio Príncipe quien hizo edificar el palacio en atención a la amenidad del sitio y a la abundancia de caza y pesca.
Entre el caserío de esta localidad destaca la parroquia de Santa María, que en la actualidad se presenta como una fábrica barroca del siglo XVIII, aunque existió un templo anterior del siglo XIII del que aún se pueden ver algunos restos. La configuración actual del recinto como una iglesia conventual de planta de cruz latina, con nave de cuatro tramos, crucero y cabecera pentagonal, se debe al proyecto del cisterciense fray Pascual Galbe, llevado a cabo entre 1740 y 1745 por los maestros Antonio Benito de Urrizola y Manuel de San Juan.
En el interior presenta sencillas pilastras, articulando sus muros y bóvedas de medio cañón con lunetos, a excepción del tramo central del crucero que lleva una media naranja con fajas radiales. Al exterior presenta muros de sillería, con contrafuertes marcando los tramos y una sencilla portada de medio punto protegida por un pórtico con tres arcadas también de medio punto.
Los retablos que adornan el crucero y presbiterio se realizaron una vez acabada la fábrica. Los colaterales son rococós y los realizó Miguel Zufía en 1765 siguiendo el proyecto del veedor diocesano José Pérez de Eulate. El retablo mayor, obra de mediados del siglo XVIII, se cierra con un cascarón y guarda en su hornacina central una imagen de la Virgen sedente con el Niño Jesús, gótica del siglo XIV que responde al tipo Andra Mari. Se trata de uno de los mejores ejemplares de esa tipología, equiparable a las tallas de Los Arcos o Miranda de Arga.
En la mesa-altar se conserva la antigua ara medieval del siglo XIV con inscripción semiperdida. Del mismo siglo es una anaquelería gótica que se aprovecha en los muros del presbiterio.
La sacristía guarda diferentes tallas entre las que destaca un Crucifijo del siglo XVII y un San Gregorio Ostiense del siglo XVIII, así como algunas piezas de platería como el ostensorio dieciochesco.
Arquitectura civil
Escaso interés histórico-artístico tienen los inmuebles de la localidad, sólo merece mención una casona con escudo rococó de la segunda mitad del siglo XVIII. El puente medieval de piedra se encuentra muy reconstruido.
Toponimia menor
Almariaz, término; Altos de Cascajo, término; los Huertos, camino; el Puente, término: San Gil, término, corral y barranco: Vergal, término y arroyo.