ARRASATE JURICO, MARIANO

(Lumbier, 17.10.1877 – Pamplona, 18.11.1935). Político y escritor. Fue diputado foral de agosto de 1926 a mayo de 1928 y de esta fecha a marzo de 1930. Escribió La expósita (1929), Macario, premio de la Biblioteca Olave de 1931 (1932) y Cuentos sin espinas (1932). Las dos primeras son novelas. El tercer título agrupa cuatro, que el autor subtitula “jocoserios”.

En el prólogo de la primera, Arrasate declara que “al escribir una novela, mi idea fundamental no ha sido escribir una novela. El fin o la idea principal ha consistido en hacer un modesto trabajo descriptivo de tipos y costumbres de Navarra, y la novela el medio para efectuarlo”; y en el desarrollo intercala “algunos toques a problemas sociales y morales quizás un poco ajenos al asunto”; así el libro “puede perder un poco de belleza, pero ganará, sin duda alguna, en valor educativo”. Tal intención define todas sus páginas. Por ejemplo, “Macario” expone el problema de conciencia de un navarro carlista, que vota a un conservador para alcanzar la libertad e inocencia de su hijo acusado de asesinato: Macario pierde la salud y la cabeza. Esta historia se desarrolla sobre fondo intemporal cuya única referencia, cuando los personajes son mozos, es la tercera guerra carlista.

Arrasate puede encuadrarse en la escuela costumbrista y regional -como venía a decir Gabriel de Biurrun en el prólogo de “Macario”- pero es ya un anacronismo, recargado de idealismo arcádico -las costumbres y relaciones sociales del mundo rural son siempre limpias- y de evidente facilidad en los esquemas y perfiles: basta leer, por ejemplo, la declaración de Florencio -personaje de “Macario”- a Gabriela, para advertir la irrealidad. Arrasate sitúa sus acciones y personajes en lugares inexistentes de Navarra, pero por las descripciones y lenguaje parece deducirse que se trata de la zona que mejor conocía, que es la de su villa natal, de la que utiliza palabras -no recogidas en vocabularios y lexicones- cuyo significado explica. Los navarrismos léxicos más notorios -chilindrón, fritada, chandrío, chirriar- van definidos de notas.

En su afán de promover las buenas lecturas dejó su hacienda en Lumbier y pueblos aledaños a la iglesia local, que instaló un centro cultural y la casa parroquial en la natal del donante.