VASCO NAVARRO, FERROCARRIL
VASCO NAVARRO, ferrocarril
Tren de vía estrecha que unía Estella con Vitoria. De allí partía otro ramal a Mecolalde, donde enlazaba con los Ferrocarriles Vascongados. Ya en 1882 se otorgó en favor de la compañía The Anglo-Vasco-Navarro Limited la concesión correspondiente, que incluía un ramal de Arróniz a Lerín. Iniciada la explotación, no llegó a construirse el tramo que afectaba a Navarra. Hasta 1919 no comenzarían las obras de la línea Estella-Vitoria, que salió a subasta en nueve tramos. Los correspondientes a territorio navarro tuvieron los siguientes costes: Estella-Zubielqui, 807.791,50 pesetas. Zubielqui-Casilla de Sierna, 313.599,47. Casilla de Sierna-Granada de Ega, 509.335,23. Y de Granada de Ega al confín de Álava, 3.702.907. Las estaciones, de construcción muy cuidada, así como las casillas, almacenes y edificios anejos costaron 485.555,66 pesetas y las 75 viviendas para empleados, 717.978,90. En explanaciones se invirtieron 4.903.132,48; en túneles, 5.857.096; en puentes, 413.365,56; en viaductos, 519.300; en carriles, traviesas, etc. 5.320.764,04 y en expropiaciones, 454.034,57. Entre las obras de ingeniería, destacaba el viaducto de Arquijas, entre Zúñiga y Acedo, con nueve arcos de 11 m de luz y 30 de altura el central. El túnel más largo en Navarra era el de Acedo, con 1,415 km.
El ferrocarril fue inaugurado el 23 de septiembre de 1927, con asistencia del general Primo de Rivera, y bendijo la línea el obispo de Vitoria. Dos años después, el 21 de diciembre de 1929, se inauguró la electrificación de la línea en toda la extensión del recorrido.
Contaba con las estaciones de Estella (km 0), Zubielqui (km 3), Zufía (km 7), Murieta (km 12), Ancín (km 15), Acedo (km 20), y Zúñiga (km 26). De allí, penetraba en Álava por Santa Cruz de Campezo (km 29), Antoñana (km 35) Atauri (km 39), Maestu (km 42), Laminoría (km 47) Ullívarri-Jáuregui (km 52), Gauna (km 54), Erenchun (km 56), Trocomz (km 59), Andollu-Estíbaliz (km 61), Aberásturi (km 63), Otazu (km 65), Olárizu (km 69) y Vitoria (km 70).
Tras una etapa de apogeo, en los años 60 la vida de este ferrocarril, integrado ya en F.E.V.E. (Ferrocarriles de Vía Estrecha), comenzó un declive progresivo, a pesar de su excelente material, hasta que el Estado decretó su cierre y consiguiente levantamiento de la línea. El 31 de diciembre de 1967 el Vasco-Navarro realizó su último servicio, sin que pudiesen impedir su muerte los esfuerzos y gestiones que -tal vez un poco tarde- hicieron distintas fuerzas vivas de Álava y Navarra.
El ingeniero director del proyecto de la ejecución del mismo fue Alejandro Mendizábal Peña, más tarde director general de Ferrocarriles.
Todavía subsisten en pie, aunque en estado de progresivo abandono casi todas las estaciones de la línea.
La de Estella, de líneas neo-románicas, ha sido objeto de obras de restauración y acondicionamiento. También puede verse aún la airosa fábrica de viaducto de Arquijas y algunos puentes y obras auxiliares a lo largo del antiguo trazado.