SANZBERRO, AGUSTÍN DE
SANZBERRO, Agustín de
Natural de Echalar; abad de Urdax los trienios 1804-1807 y 1815-1818; hermano de otro ilustre canónigo premonstratense de Urdax, Norberto Sanzberro. Admitido al hábito en 1765, profesó el 25 de agosto de 1766; vicesecretario en 1788; depositario, en 1790; arquero de la “ferrería” con el prior Pedro de Satillarena; vicario de la parroquia de Urdax en 1792, incendiada por los franceses en 1793; servida por Sanzberro hasta que en 1804 fue elegido abad trienal de Urdax en Loyola, refugio premonstratense. A él recurren los vicarios dispersos en las parroquias de Urdax, Zugarramurdi, Elizondo, Arráyoz, Garzáin, Aniz y Eugui y la diputación foral de Navarra, que le suplicaron el regreso. Reunida la comunidad en Loyola, decidió por diez votos contra uno en 1804, restaurar al menos parcialmente el convento de Urdax y ocuparlo nuevamente. Acudió Sanzberro al P. Maestro, Diego Rodríguez Mendo, general reformador del Orden Mostense en España, el cual le ordenó ponerlo en conocimiento del monarca “a fin de que su piedad resuelva lo más conveniente”, Pedro de Ugartemendía, académico de la Real de San Fernando, y arquitecto, calculó en 170.772 reales de vellón los gastos de material y mano de obra (Tolosa, 19 de enero de 1805). Cuando estaba la obra en marcha se recibió una orden conminatoria de los superiores generales, desde la abadía de Retuerta, imponiendo la suspensión de los trabajos, so penas severísimas contra Sanzberro. Se adujo el real decreto de 17 de octubre de 1789, que prohibía toda reparación importante en los templos sin previa aprobación de los planos por la Academia de Bellas Artes; replicó Sanzberro que no regia en Navarra, porque sus Cortes lo declararon contrafuero en 1794. Vencidos los obstáculos, se reincorporaron los premonstratenses al monasterio de Urdax, previa autorización real, los días 19 y 21 de 1806. La Diputación Foral felicitó a Sanzberro por su tesón y su regreso.