ORORBIA
Categoría histórica: Lugar.
Categoría administrativa: Concejo y capital de la Cendea de Olza.
Partido Judicial: Pamplona.
Merindad: Pamplona.
Comarca: Cuenca de Pamplona.
Población (1986): 344 habitantes de hecho, 351 de derecho.
Superficie: 4,42 km2
Distancia a Pamplona: 9 km.
Comunicaciones: Carretera local hasta Pamplona y con enlace en Astráin con la general N-111, Pamplona-Logroño.
Geografía
Situada en una llanura, en la margen derecha del río Arga. El término confina al N con Zuasti, al E con Arazuri, al S con Paternáin, y al O con Artázcoz.
Realizada la concentración parcelaria (1967): 362 Ha, 39 propietarios, 997 parcelas antes y 150 después. Comunes, 50 Ha (16 de secano, 28 de pastos, 1 de monte maderable). Cooperativa Agrícola-Caja Rural fundada el 4.12.1947. Industrias: fabricación de electrodos para altos hornos (439 obreros en 1982), accesorios y repuestos de automóviles (435).
Genéro
Primitiva villa de señorío realengo, el monarca García Sánchez III el de Nájera la dio (1043) a Sancho Fortuñones, el cual a su vez la transmitió también con su iglesia al monasterio de Leire (1047). Poseyeron también heredades en su término la abadía de Irache desde finales del siglo XI, la catedral de Pamplona desde el XII y los Hospitalarios de San Juan de Jerusalén desde el XIII. En la documentación más antigua consta con las grafías “Oreribia”, “Orerbia”, “Orelivia”, “Ororibia”, “Oroliuia”.
Ororbia hizo ordenanzas para su buen gobierno en 1544. En 1802 era realengo y tenía molino con dos piedras. En 1847 tenía escuela, dotada con dos mil reales, y la iglesia era servida por un vicario y dos beneficiados que, hasta la reciente exclaustración, habían sido presentados por el rey o por el abad de Leire según el mes en que se daba la vacante.
En los años veinte de nuestro siglo había un colegio de monjas, con asilo y colegio, obra en parte de una fundación privada.
Sólo existió un asilo de Ancianos por fundación de José Larrosa y Romeo, quien hizo testamento en Pamplona el 12 de febrero de 1902. Al cuidado de los ancianos se hallaba una comunidad religiosa.
Arte
El templo parroquial de San Julián es una construcción gótica de fines del siglo XIV y comienzos del XV con una sola nave de amplia luz, cubierta en sus cuatro tramos por bóveda de crucería, dos capillas a modo de crucero y cabecera octogonal. De la primitiva fábrica cisterciense de la primera mitad del siglo XIII resta el campanario y el baptisterio. Entre los vanos de iluminación destacan las ventanas del paño central de la cabecera y la del costado meridional, en tanto que entre las puertas llaman la atención las de acceso a los pies y en el muro sur y la de comunicación entre la capilla bautismal y la nave, todas ellas apuntadas y con decoración vegetal que en la última se enriquece con piñas y dragones.
El retablo mayor de San Julián el Hospitalario constituye en sus tablas un exponente de la pintura del Primer Renacimiento en Navarra, ya que no tiene punto de comparación con otras obras realizadas en 1525-1530, en un panorama que dominaban pintores como Diego Polo, Francisco de Orgaz y Juan de Bustamante. En los pasajes más señalados de la vida del caballero y penitente Julián, narrados en la Leyenda Dorada de Santiago de la Vorágine y semejantes, si no falsilla de los de la leyenda de Teodosio de Goñi, como los de la cacería del ciervo, asesinato de sus padres, construcción del hospital y traslado nocturno del cuerpo de un peregrino en la barca demuestra el maestro de Ororbia su conocimiento de modelos de Durero así como de los pintores rafaelescos flamencos. Completan el programa de este retablo una talla de la Virgen con el Niño y San Juanito, el estilizado titular vestido de cazador y acompañado por su perro y un halcón, junto a las tablas de la Infancia de Cristo, Vida de la Virgen y Pasión.
Conocemos con todo lujo de detalles las vicisitudes de la fábrica de los dos retablos colaterales, ejecutados por Domingo Pérez, Pedro Moret y Juan de Gastelúzar en lo que a la talla concierne a partir de 1587, y policromados por Alonso de Lasao doce años después, si bien actualmente se encuentran embadurnados por un repinte. Completa el ajuar litúrgico un sagrario pintado en 1607 por Juan de Landa con escenas de la Pasión del Señor que se halla retirado en una dependencia, y un lienzo barroco de San Juan Bautista situado en el coro.
Arquitectura civil
Entre el caserío sobresalen las casas del “Rubio” del siglo XVI, la de la calle del Ángulo, obra del siglo XVIII y la que, según atestigua una inscripción, mandó construir don Juan José de Bidaurreta en 1785, con cubierta a cuatro aguas, ingreso de medio punto, ventanas con cercos de sillar, frontón en el primer piso y saliente alero de madera.
Además de la fuente y un puente de cinco ojos y potentes tajamares, llama la atención la presencia a la entrada de este último del crucero que en 1540 hizo erigir el beneficiado Juan de Ororbia. Es uno de los más originales de Navarra, pues consta de basa ática, fuste cilíndrico, capitel corintio con cuatro cabezas de carnero en sus frentes y florones en los brazos de la cruz que se enlazan entre sí por medio de dobles volutas. También tiene interés desde el punto de vista iconográfico por la representación en el anverso de un expresivo Cristo crucificado con la calavera de Adán a sus pies, en tanto que en el reverso aparece una Virgen erguida con el Niño.
Esparcimiento
Las fiestas patronales en honor de San Julián (trasladadas) se celebran el último domingo de agosto (cinco días, de viernes a martes).