MOZÁRABE
MOZÁRABE
Del árabe musta´rib, arabizado. Se denominó así a los hispanos que profesaban el cristianismo bajo la dominación política del Islam. Sus comunidades eran principalmente urbanas, como la de Nájera, incorporada al reino de Pamplona por Sancho Garcés I (922). La monarquía leonesa acogió notables contingentes de inmigrantes mozárabes, mientras que en la región pamplonesa solo debió de producirse algún caso esporádico; así con los antepasados del monje Galindo de Córdoba que, a comienzos del siglo XI, disponía de cuantiosos bienes raíces en el término conocido sin duda por ello con el nombre de Cordobilla. La reconquista de Tudela por Alfonso I el Batallador (1119) supuso para Navarra la incorporación de una minoría Mozárabe, siquiera residual, incrementada enseguida por una parte de los que dicho soberano fue recogiendo en su profunda expedición por tierras andaluzas y levantinas (1126). Consta, por ejemplo, que a los asentados en Mallén se les otorgó (1132) precisamente el estatuto de franquicia dispensado antes a los pobladores cristianos de Tudela.