MORGOTA, MARTÍN DE
MORGOTA, Martín de
Escultor, vecino de Zumbelz, estuvo casado con Catalina de Gabiria, hija del ensamblador Pedro de Gabiria, con quien colaboró en los retablos de Iturgoyen y Azcona; a su muerte estableció relación artística con Bernabé Imberto; los colaterales de Cárcar. Sostuvo un sonado pleito con el escultor Lope de Larrea, disputándose el retablo de Vitoria, dentro de la polémica que mantenían ensambladores y escultores relativa a sus respectivos oficios; gracias a él se pueden conocer noticias de otras obras del escultor localizadas en Eraul, Ugar y Arizala. El retablo de Azcona, terminado para 1606, se estructura a base de un banco con pilastras decoradas con motivos geométricos en cuyo interior se inscriben relieves de los Evangelistas, Santos y Doctores, seguido de un cuerpo y un complicado remate con el Padre Eterno bajo frontón, todo ello obra de Pedro de Gabiria. De mediana calidad aunque de efecto es la escultura, que se desenvuelve dentro de la monumentalidad propia del Romanismo, como es patente en los relieves de la Pasión de Cristo y en la talla del titular San Martín. Una traza semejante repiten los maestros en el retablo mayor de Iturgoyen donde vuelve a aparecer el gusto decorativo en las pilastras del banco. En este lugar se venera el grupo de la Trinidad procedente de la ermita de su nombre; el Padre Eterno, inspirado en el Moisés miguelangelesco, muestra a su Hijo en la Cruz. El resto de la escultura del retablo reproduce pasajes de la Pasión y de la Infancia de Cristo de técnica ruda y el titular San Millán, de bulto entero que ocupa la caja central. Bernabé Imberto estimó este retablo en la cantidad de 1.213 ducados.
Bibliografía
T. Biurrun, La escultura religiosa y Bellas Artes en Navarra durante las épocas de Renacimiento (Pamplona, 1935), p. 371. M. C. García Gaínza, La escultura romanista en Navarra, 1969, p. 226-231. J. Ursúa, Pedro de Gabiria y Martín de Morgota “” (1980), p. 445-506.