MISIÓN DIOCESANA DE NAVARRA
MISIÓN DIOCESANA DE NAVARRA
Nombre dado originariamente a la organización encargada de atender a los Equipos Misioneros Diocesanos que, en cumplimiento de convenios interdiocesanos, envía el arzobispo de Pamplona a diócesis misioneras o necesitadas de sacerdotes.
Comenzó su andadura en la Fiesta de San Francisco Javier de 1958; con ocasión del XXV aniversario de la Academia de Misiones del Seminario Conciliar, Mons Delgado Gómez se comprometió a entrar por los nuevos caminos de cooperación misionera que abría a las Iglesias Particulares la encíclica Fidei Donum de Pío XII y que, posteriormente, consagraría el Concilio Vaticano II.
En virtud de aquellos convenios, Navarra puso al servicio de diócesis necesitadas un número determinado de sacerdotes diocesanos -en ocasiones, a ellos se unieron también religiosas y laicos- y les prestó ayuda material para sus obras. Lo hizo, con las diócesis de Guaranda y Guayaquil (Ecuador); con las parroquias-misión de Burehe, Nemba y Kinoni (Rwanda, África); y con el Vicariato Apostólico de Machiques y las diócesis de Cambimas y Caracas (Venezuela).
Después surgieron entre laicos de Navarra dos obras de cooperación, aunque no estrictamente misioneras: Ayuda al Tercer Mundo, para el envío de medicamento, y Medicus Mundi de Navarra, para la atención del Hospital-Maternidad de Nemba.