MALUQUER DE MOTES Y NICOLÁU, JUAN
MALUQUER DE MOTES Y NICOLÁU, Juan
(Artesa de Segre, Lérida, 1916-Barcelona, 28.9.1988). Arqueólogo. Discípulo de P. Bosch Gimpera y L. Pericot, perteneció a la denominada Escuela Arqueológica de Barcelona. A partir de 1941 trabajó como profesor en la Universidad de Barcelona y desde 1949 en el Departamento de Clásicas, desde donde impulsó el estudio de la Prehistoria de la Meseta. A esos años corresponde la fundación de la revista “Zephirus”.
En 1951, invitado por la Diputación Foral de Navarra, a través de Blas Taracena, comenzó su vinculación con la Prehistoria y Arqueología navarra. Se hizo cargo del Servicio de Excavaciones de Navarra en 1952, emprendió sus tareas de campo con la excavación de una necrópolis de incineración en la Torraza de Valtierra, e inició sus publicaciones con el estudio de las hachas de bronce del Museo de Navarra. En el mismo año comenzó su primera campaña de excavación en Cortes, que continuó en 1953. Este mismo año realizó prospecciones en los términos de Bigüezal, Aspurz y Navascués con la localización de cuatro dólmenes. Continuó los trabajos de campo, dedicando las campañas de 1955, 1956 y 1957 al estudio del yacimiento de Cortes de Navarra.
En 1958 se trasladó a la Cátedra de Arqueología de la Universidad de Barcelona, donde fundó el Institut d´Arqueología y Prehistoria y sus órganos de difusión: la revista “Pyrenae” y la serie de monografías Publicaciones Eventuales.
También desde Barcelona continúa su vinculación a Navarra. En 1958 realizó la excavación del covacho sepulcral de Urbiola, en Tierra Estella. Posteriormente, dedicó su actividad a la exploración sistemática de la zona del Roncal, estudiando numerosos dólmenes, y de la zona de Artajona, donde junto a Francisco Medrano estudió los megalitos, localizando además un yacimiento de superficie. Dentro de esta misma colaboración, entre los años 1959 y 1964 realizó varias campañas, estableciendo la estratigrafía del covacho de Berroberría en Urdax.
Esta labor en el campo de la Prehistoria y la Protohistoria de Navarra se reflejó en su abundante producción bibliográfica. Ya en 1953 presentó una comunicación sobre la Casa en los poblados de Cortes, al III Congreso Arqueológico Nacional, celebrado en Galicia. Este mismo año publicaba la memoria de la excavación en la Torraza de Valtierra.
Con ocasión del Congreso Internacional de Ciencias Prehistóricas y Protohistóricas celebrado en Madrid, editó la Diputación Foral el primer volumen sobre Cortes de Navarra, en el que tras ordenar las investigaciones anteriores, realizó una interpretación cronológica de los poblados sucesivos, con especial atención a los estratos superiores. Otra de sus publicaciones de esta época corresponde al estudio de los materiales líticos de Coscobilo en Olazagutía.
En 1956 publicó el estudio sobre la necrópolis de incineración en la Atalaya de Cortes en colaboración con Vázquez de Parga, quien había realizado anteriormente las excavaciones. A continuación, en 1957, apareció el segundo volumen monográfico con el análisis e interpretación del yacimiento del Cerro de la Cruz en Cortes, en el que se difundía el alcance de sus investigaciones.
Un acontecimiento que merece ser destacado es la organización y dirección por su parte del I Simposium de Prehistoria Peninsular en septiembre de 1959, celebrado en el Museo de Navarra, bajo el patrocinio de la Institución Príncipe de Viana. Asimismo hizo estudios sobre los monumentos megalíticos de Artajona, la Peña del Saco de Fitero, la Casa en la Edad de los Metales en los yacimientos navarros, y el avance sobre sus investigaciones en Berroberría.
Como colofón de esta fecunda etapa de dedicación a la Prehistoria y Arqueología navarra, hay que señalara organización y dirección del IV Simposium de Arqueología Peninsular, en diciembre de 1965, para conmemorar el 25 aniversario de la fundación de la Institución Príncipe de Viana, cuyas actas fueron publicadas en 1966.
En el largo espacio de tiempo que va desde estas fechas, hasta 1983 en que reanudó sus trabajos en Navarra, Maluquer centró su labor investigadora y docente en Barcelona, abarcando el estudio de las comunidades prerromanas peninsulares durante el primer milenio a.C.
Desde 1983 hasta su última campaña de excavaciones, en septiembre, se dedicó a la revisión del yacimiento de Cortes, con especial atención a los estratos inferiores que no quedaron suficientemente estudiados anteriormente.
Inesperadamente, en plena actividad, falleció, cuatro días antes cerraba la campaña de excavaciones en Cortes de Navarra. Su desaparición supuso la pérdida de una de las personalidades más prestigiosas en el ámbito de la docencia e investigación prehistórica peninsular.