JACA
JACA
Ciudad de la actual provincia de Huesca. Su nombre remite a los Iacetani, grupo étnico documentado en época romana y presuntamente relacionado con los vascones. Los textos árabes de los siglos VIII y IX sitúan, sin embargo, a los “Sirtaniyyun” en el tramo superior de la cuenca del río Aragón, acaso una reminiscencia de los Cerretanos, identificables a su vez con el primitivo sustrato de pobladores de todo el Pirineo central; la toponimia sugiere una cierta afinidad de estas genes con los vascones del sector occidental de la cordillera.
El distrito jacetano, con los valles de Canfranc y Echo, debió de constituir a comienzos del siglo IX el núcleo aglutinador del condado Francocarolingio de Aragón, inscrito una centuria después en el naciente reino de Pamplona. Jaca era una modesta villa de señorío realengo cuando el monarca Sancho Ramírez de Aragón decidió (1076) convertirla en una “ciudad”, sede episcopal y escala obligada de los peregrinos que se dirigían a Santiago, salvando el Pirineo por el paso de Somport; se ofreció para ello a los pobladores del lugar un estatuto jurídico de libertad, ingenuidad y franquicia, el Fuero de Jaca, que iba a servir de modelo en la configuración inmediata de los nuevos núcleos de población franca o burguesa en tierras navarras como Estella (1090) y Sangüesa, fundados por el propio Sancho Ramírez, convertido ya en soberano de Pamplona. No obstante, la separación definitiva de los reinos de Navarra y Aragón (1134), todavía a mediados del siglo XIV, los jurados o munícipes de San Cernin de Pamplona planteaban a los de Jaca sus dudas sobre la interpretación del Fuero que, por acuerdo de Alfonso I el Batallador (1129), había servido también para la configuración originaria de aquel “burgo” navarro. El monarca pamplonés García Ramírez saqueó los burgos jacetanos en 1137 y 1141 y Carlos II de Navarra también alcanzó sus cercanías en su guerra con Pedro IV de Aragón (1362).
Su sede episcopal se trasladó a Huesca en cuanto se reconquistó esta ciudad (1096) pero fue restaurada en 1571. La diócesis quedó inscrita en la provincia eclesiástica creada modernamente (1956) al erigirse Pamplona en sede episcopal.