IZQUIERDO DE RIBERA, EUGENIO
IZQUIERDO DE RIBERA, Eugenio
(Navarra ca. 1745? – París, 1813). En rigor, el único dato que vincula a Navarra al embajador Izquierdo de forma peculiar es la mera posibilidad de que naciese en la provincia. Aunque insistentemente se le ha considerado natural de Zaragoza, algunas fuentes aluden con imprecisión a su naturaleza.
Izquierdo fue a ser el primer gran afrancesado. Nació en una familia humilde, parece que su inteligencia y laboriosidad le permitieron adquirir una amplia cultura, que se concretó en la pertenencia a la Sociedad Vascongada de los Amigos del País y en la ampliación de sus estudios en París, pensionado por Carlos III (IV de Navarra); se hallaba en la capital francesa ya en 1776, bien relacionado enseguida con algunos medios ilustrados que le serían después muy útiles para sus empeños políticos.
Su estancia en el extranjero no tardó en derivar hacia el desempeño de labores y misiones diplomáticas, sobre todo desde 1780, en que comenzó a trabajar en la embajada de Viena. Vivió en París las jornadas revolucionarias de 1789, estuvo en relación con los jacobinos y, cuando regresó a España -hacia 1.792-, el apoyo de Godoy le valió el nombramiento de director del Gabinete de Historia natural. Nunca abandonó sus estudios ni tampoco sus negocios.
Como enviado de Godoy, volvió a París en 1798 -para ser expulsado por el Directorio- y en 1804-1808, desde 1806 con el nombramiento oficial de embajador de Carlos IV (VII). A él se debieron las negociaciones que condujeron en 1806 al posible acuerdo entre Napoleón y Godoy para conquistar Portugal. En 1808, no obstante, cuando conoció la verdadera intención del emperador estribaba en la conquista de España, regresó a la corte para advertir al rey y convencerlo de que pasase a Cádiz y América. Estuvo presente en las abdicaciones de Bayona y pasó después a París como secretario de Estado del destronado Carlos IV. Allí murió.