IRÍZAR, MIGUEL DE
IRÍZAR, Miguel de
(Artajona, 1635-Segovia, 1684). Músico y compositor, uno de los más destacados en la España de su tiempo, debió de estudiar bajo la dirección de los organistas de la iglesia parroquial de la villa, Juan de Morales y Martín de Irurita. En León fue discípulo aventajado de Tomás de Micieces senior maestro de capilla de la Catedral, siendo del número de los seises o niños de coro los “collexiales de Sant Joseph”. Junto con su coterráneo el falcesino Matías de Durango, obtuvo licencia y ayuda para acompañar a Micieces, cuando éste se mudó a Toledo en 1650. Siete años más tarde, estaba maduro para actuar como maestro de capilla y fue admitido por tal en la Colegiata de Vitoria, al parecer sin oposiciones. Durante su permanencia en esta ciudad se ordenó de sacerdote (1664) y opositó en Orense, sin éxito. El Cabildo de la Catedral de Segovia, leído el informe presentado, aceptó el ofrecimiento y le nombró maestro de capilla, en agosto de 1671, sin el requerimiento de las oposiciones.
Apenas se conoce música compuesta por Irízar durante su vida de magisterio en Vitoria; por el contrario es amplísimo el rol de obras escritas en Segovia. Según J. López Calo, en el transcurso de los 13 años que estuvo en dicha ciudad, dio fin a más de 750 trabajos, algunos de gran envergadura. Distribuido su acervo musical en géneros, queda clasificado así: 14 misas, más dos de Requiem, 55 salmos, 15 “Magnificat” y “Nunc dimittis”, 15 lamentaciones de Semana Santa, 27 motetes, todo ello en latín; 185 villancicos de Navidad, 203 de Corpus y 248 de la Virgen, santos, etc, en total 128 obras en latín y 636 en castellano.
En su producción latina predomina el estilo imitativo, contrapunto, alternando a veces con la armonía vertical; en él evidencia trazo seguro, riqueza temática y habilidad técnica que incorpora la modernidad barroca. En los villancicos su fecundidad desborda en melodías más fáciles, ligeras, no superficiales, en consonancia con su destino, y de textura menos compleja; abundan los números para dos voces y acompañamiento y las breves composiciones; no tradujo su inspiración en belcantismo, quizá porque no encajaba con su propio talante musical o tal vez no señoreaba todavía las capillas en España; sí adoptó con profusión otra modalidad del barroco, la escritura para varios coros (12 voces a tres coros).
Bibliografía
López Calo, José: Corresponsales de Miguel de Irízar, “Anuario Musical”, (Barcelona, 1963), XVIII, pág 197. La Música en la Catedral de Segovia. Vol I, “Catálogo del Archivo de Música”, (Segovia, 1988). Siemens Lothar: El Maestro de capilla palentino Tomás Micieces I, “Anuario Musical”, (Barcelona. 1975), XXX, pág 91.