GREZ
Categoría histórica: Lugar.
Categoría administrativa: Concejo del Valle de Urraul-Bajo.
Partido Judicial: Aoiz.
Merindad: Sangüesa
Comarca: Cuenca de Lumbier-Aoiz.
Población (1986): 18 habitantes de hecho, 18 de derecho.
Distancia a Pamplona 37 km
Comunicaciones: Carretera local que enlaza en Artieda con la comarcal NA-150, Pamplona-Aoiz-Lumbier.
Geografía
Limita al N con Artajo, al S con Ascoz, al E con Artieda y al O con Turrillas.
Comunes, 181 Ha (149 de pastos, 17 de secano, 15 de monte maderable).
Está documentado ya como apellido locativo en 1097 (Fortunio Enecones de Guerez). Durante la Edad Media consta con las grafías “Gerez” y “Guerez”. El monasterio de Leire adquirió heredades en su término en 1129; se cita entonces la iglesia local consagrada a los Santos Fabián y Sebastián. En 1427 sus vecinos labradores debían a Santa María de Roncesvalles una pecha anual de 2 cahíces y medio de trigo.
Parroquia de San Esteban.
Hasta la primera mitad del siglo XIX lo gobernaban los diputados nombrados por el valle de Urraúl Bajo, con los regidores designados por el lugar por alternancia entre las casas. En 1850 los caminos eran sólo locales y llevaba y traía el correo el valijero del valle.
Arte
La iglesia de San Sebastián y Santa Quiteria es un edificio de origen medieval (siglo XIII) en estilo de transición al gótico, hecho en mampostería, al que los añadidos posteriores no alteraron su aspecto primitivo. Tiene nave única, cabecera de testero recto, y una torre campanario de aspecto militar sobre el primer tramo de la nave. Se llega a su interior por una sencilla puerta de arco de medio punto abierta en el muro del lado de la epístola. Se cubre con bóveda de cañón apuntado sobre fajones que apoyan en ménsulas adosadas a la pared bajo la moldura. Su mejor ornato, el retablo mayor de estilo romanista hecho por los maestros del taller de Lumbier -el ensamblador Juan de la Hera y el escultor Gaspar Ramos en la primera mitad del siglo XVII- es hoy un triste recuerdo de lo que fue, debido a los robos recientes sufridos en la iglesia que hicieron desaparecer gran parte de su decoración tallada (relieves e imágenes de bulto) y a una policromía agresiva que adulteró su belleza original. Se conserva sólo el cuerpo superior del retablo repartido en tres calles y dos entrecalles más el ático al haberse perdido el cuerpo inferior y el doble banco que servía de apoyo. Se conservan los relieves de las calles externas con escenas de la vida de San Sebastián (su Predicación y Prendimiento por orden de Diocleciano) las tres figuras del Calvario del ático -hoy dispuesta separadamente en el mismo lugar- y dos apóstoles que estuvieron en las entrecalles de la zona central del retablo.
Bibliografía
C. García Gaínza, La escultura romanista en Navarra (Pamplona, 1986, 2.ª ed.), p. 203-204.